OBSERVACIONES DE AURAS EN LAS SESIONES TERAPÉUTICAS
BARBARAANNBRENNAN
Capítulo 11
OBSERVACIONES DE AURAS EN LAS SESIONES
TERAPÉUTICAS
El aura es, en realidad, el «eslabón perdido» entre la biología y la
medicina física y la psicoterapia. Es el«lugar» donde se localizan
todas las pautas sobre emociones, pensamientos, recuerdos y
comportamientos que solemos discutir incansablemente en la terapia.
Estas pautas no están
simplemente suspendidas en algún lugar de nuestra
imaginación, sino que se sitúan en el tiempo y en el
espacio. Los pensamientos y las emociones se desplazan entre
las personas en el tiempo y en el espacio a través del campo
energético humano, y el es tudio de esta actividad
constituye el medio para aprender a dominarla.
Observemos algunos de los flujos energéticos fluidos de
las auras cuando las personas se agitan en sus vidas
cotidianas, y luego en sesiones terapéuticas. Nos
concentramos en las formas móviles coloreadas de las
cuatro capas inferiores del aura, y continuaremos
hablando de los chakras en un capítulo posterior.
La percepción de los
colores en el campo
Cuando se empieza a leer las auras puede que no se
comprenda inmediatamente el significado de los colores.
Luego, con la práctica, se aclarará su significado
general. Si el profesional tiene una mayor sensibilidad
mediante el empleo de sus dones, sabrá leer el
significado de los colores que percibe.(Hablaremos en
detalle de los colores en el capítulo 23.)
Recuerdo una de las primeras «explosiones» del campo
energético humano que he observado como una de las más
vívidas. En 1972, durante una sesión práctica
en la que se produjo una intensa carga de gritos
primarios bioenergéticos, vi a Linda encenderse comoun
árbol de navidad mientras gritaba por la muerte de su
padre, fallecido de cáncer. De su cabeza surgían
brillantes rayos de colores rojo, amarillo y naranja y
algunos azules. Parpadeé, pero los coloresno
desaparecieron. Miré de manera indirecta, me moví por la
habitación y volví a mirar: el fenómenoseguía estando
allí. Estaba viendo algo; ya no podía negar por más
tiempo las numerosas experiencias que había tenido en la
observación de colores aparentes alrededor de las
cabezas de las personas. Empecé a observar el fenómeno
con mayor atención.
Poco a poco fui adquiriendo más experiencia en la vi
sión del aura y empecé a relacionar mis
averiguaciones con el estado personal de cada sujeto.
Descubrí que las personas irradian colores brillantes
cuando se encuentran afectados por sentimientos o
acciones. Cuando una persona se encuentra tranquila, su
campo aural vuelve a un estado «normal», estable.
He comprobado que, por lo general, el aura tiene el
aspecto «normal» o «de quietud» que se ve en la figura
7- 1. Muestra una capa palpitante de color púrpura
azulado oscuro o transparente que sobresale desde 6 mm
hasta 3,75 cm de la epidermis. Palpita continuamente a
razón de unas 15 pulsaciones por minuto. Las pulsa-
ciones forman, por lo general, un movimiento ondulante
hacia abajo de los brazos, las piernas y el torso. Pri-
mero está rodeada por una capa nebulosa de azul claro a
gris, mucho más brillante cerca del cuerpo y que seva
desvaneciendo a medida que se aleja de éste. El color
azul se torna generalmente amarillo alrededor de
lacabeza hasta una distancia de 7,5 a 10 cm. Es normal
que se perciban luminosidades de color azul claro sur-
giendo de las puntas de los dedos, las manos y los pies
y por la parte superior de la cabeza. He comprobado que,
si se proporcionan instrucciones claras, tras unos
minutos de práctica la mayoría de las personas pueden
ver las luces que salen de las puntas de sus dedos.
Aunque la mayor parte de las veces estas luminosidades
son de color azul, varían también en las áreas del rojo
y el púrpura, y pueden ser de cualquier color.
Ejercicios para observar
las auras de otras personas
Ahora que el lector ha realizado los ejercicios del capí
tulo 7, observando el aura en las puntas de sus dedos,
veamos las que despiden otras personas.
Sitúese de nuevo una habitación en penumbra (a la luz
del atardecer, no totalmente oscura). Debe ver con
todafacilidad las caras de otras personas. Pida a algún
amigo que se ponga de pie en frente de una pared o una
pantalla blanca y lisa. Asegúrese de que no hay luces a
las que pueda usted mirar accidentalmente; de lo quese
trata es de relajar la vista.
Para ver el aura tendrá que recurrir a su visión
nocturna, como cuando camina en la oscuridad y se da
cuentade que ve mejor las cosas si no las mira
directamente. Se emplean los bastoncillos en vez de los
conos. Losbastoncillos son mucho más sensibles a los
niveles bajos de luminosidad que los conos, que se
utilizan para la luz solar y el color brillante.
Mire al espacio cercano a la parte superior de la cabeza
de su amigo, o al del área del cuello y los hombros.
Desenfoque la vista para mirar a una zona de espacio, en
vez de a una línea fina del mismo. Mientras contempla
difusamente un espacio de 10 a 14 cm de es pesor
alrededor de la cabeza, deje que la luz penetreen sus
ojos. Debe crear la sensación de que está dejando entrar
algo en ellos, en vez de esforzar la vista para
atrapar la imagen, como se suele hacer cuando se intenta
de ver bien algún objeto. Concédase mucho tiempo. Hágalo
con otras personas, preferentemente con alguien
habituado a ver auras, para comparar lo que ve cada uno.
Es posible que, en el mismo momento en que crea ver
algo, la visión desaparezca incluso antes de que pueda
exclamar « ¡eso es!». Asegúrese de que al mirar a algún
punto de la pared lisa no ve lo mismo. Este es el efecto
de imagen refleja, con el cual los ojos conservan la
imagen por el efecto del color complementario o porla
intensidad de un contraste brillante. El fenómeno aura]
es muy veloz y no permanece; palpita. Puede que lo vea
fluir hacia abajo por el brazo, o lanzar un destello de
color hacia arriba saliéndose del campo. Tal vez vea
en torno al cuerpo una niebla de aspecto poco llamativo.
No se desanime; es sólo el principio.
Compre unas gafas de aura en una librería holística y
siga las instrucciones que las acompañan. Le ayudarán a
desarrollar su capacidad de ver y tienen un efecto
acumulativo sobre la sensibilidad del ojo. El cristal de
color azul cobalto es el mejor, pero es difícil de
encontrar. La mayoría de las gafas de aura son púrpura
oscuro y dan buen resultado.
No prolongue ninguno de estos ejercicios; comprobará que
transcurridos unos instantes se encuentra muycansado. He
observado que los componentes de un grupo se excitan
extraordinariamente cuando ven algo; luego, al
continuar, les asalta la duda y el sistema energético de
cada persona se agota. No tardará en tener la habitación
llena de personas silenciosas y cansadas. En
consecuencia, practique sólo un poco cada día. Y
compruebe lo que ve con las ilustraciones y las
descripciones que siguen.
Cuando una persona experimenta un fuerte sentimiento, su
aura en reposo se ve penetrada súbitamente por otro
color y forma relacionados con su estado emocional.
Luego, cuando dicho sentimiento se ha aplacado, el aura
recupera su aspecto general original. El tiempo que
lleva este proceso varía según el individuo y depende
de diversos factores. Si la persona no ha apaciguado su
sentimiento, éste se mantendrá en su aura(normalmente
desvaída) hasta que desaparezca. Si libera sólo parte de
su sentimiento, esa parte se apaciguará. Los colores y
las formas pueden destallar rápidamente y salirse del
campo aural, o quizá se desvanezcan durante algunos
minutos, o incluso durante semanas. Pueden también
colorearse o enmascararse con otros colores y formas
haciendo un efecto de capas. Algunas formas, a las que
me referiré más adelante, permanecen en el aura durante
años. Cada pensamiento, sentimiento y experiencia de una
persona tiene efectos sobre el aura y la cambia. Algunos
efectos se mantienen para siempre.
La figura 11-1A muestra el aura normal de un hombre.
Cuando canta (figura 11-1B), el aura se expande y
brilla.
Justo después del movimiento de inhalación surgen
destellos y chispas como relámpagos de color violeta
azulado iridiscente, antes de empezar cada nueva frase.
A medida que los presentes ponen más atención, su aura
general se expande. Grandes arcos de luz se ex tienden
desde el cantante hacia el público, y las auras de ambos
se conectan. Cuando fluyen los sentimientos entre el
intérprete y el público empiezan a crearse formas
mutuas. Estas formas energéticamente conscientes se
relacionan, en estructura y color, con los pensamientosy
sentimientos mutuos del grupo y de la música que se está
creando. Al concluir la canción, las formas
sedesconectan y disgregan a causa de los aplausos, que
ac túan corno si fueran una goma de borrar que limpia el
campo para la siguiente creación. Tanto el intérprete
como quienes lo escuchan son activados al recibir la
energía creada por la música. Una parte de esta energía
se interiorizará para romper los bloques mantenidos
en el cuerpo; otra parte se usará para la siguiente
creación.
Cuando una persona pronunca una conferencia sobre su
tema favorito, su aura se expande y toma una co-
loración plateada dorada o lanza chispas de color azul
iridiscente, como se ve en la figura 11 -1 C. Se
produceel mismo fenómeno actuante-público, esta vez con
mayor intensidad en las energías mentales, que aparecen
como amarillo dorado. Concluida la conferencia, el aura
del orador permanece expandida cierto tiempo, ya que
su trabajo lo ha elevado. Se ha producido un intercambio
mutuo de conciencia energética. Parte del públicovibra
ahora más a su nivel. La figura 11-ID muestra el aura de
un hombre que habla apasionadamente sobre la educación.
Quienes lo escuchan recogerán probablemente parte de su
color marrón rosado. Esto se produce por un proceso de
elevación de las propias vi braciones al nivel del
hablante mediante la inducción armoniosa.
El amor brilla en el aura con un hermoso tono rosado. En
ocasiones tiene un tinte dorado. Los
sentimientosespirituales presentan una gama de colores:
azul para quien dice la verdad, púrpura para la
espiritualidad y oro plateado para la pureza.
A veces, las personas irradian colores similares a los
que les gusta llevar en sus vestimentas. La figura 11-1E
muestra a una mujer que ha dirigido una clase de
energética de núcleo (ejercicio físico centrado en
provocar el afloramiento de los sentimientos para
facilitar la comprensión de su psicodinámica). El verde,
que ella suele llevar con frecuencia, está relacionado
con la salud fí sica y la curación. Otro ejemplo, en la
figura ll-1F, muestra
a un hombre que irradia frecuentemente un color lila,
correspondiente a una de sus camisas favoritas. Este
color parece guardar relación con los sentimientos
amorosos y la suavidad que posee. La figura I1-1G
muestra
a una mujer en actitud meditativa para aumentar la
energía de su campo, que se presenta en muchos
colores,algunos de los cuales han saltado delante de
ella en un movimiento fluido. Su centro volitivo entre
los omóplatos es parcialmente visible.
Cuando una mujer se queda embarazada su campo se expande
y se hace mucho más brillante. La figura 11-1H muestra a
una embarazada de seis meses; va a tener una niña. La
futura madre muestra hermosas bolas suaves de colores
azul, rosa, amarillo y verde que giran entre sí sobre
sus hombros.
Estos son sólo unos cuantos ejemplos sobre la unión y
conexión inherente del campo energético humano con todo
lo que vemos que se produce en los niveles puramente
físicos y psicológicos.
La ira y otras emociones
negativas
El rojo ha estado asociado desde siempre con la ira. Sin
embargo, cierto dí a, mi hijo de 11 años, un muchacho
lleno de felicidad y energía, mostraba, mientras estaba
jugando alegremente, el aspecto de la figura 11-1A, con
brillantes franjas rojas y anaranjadas irradiando de su
cabeza. La calidad del color rojo es la que indica ira.
El naranja rojizo brillante no tiene nada que ver con la
ira, sino que está relacionado con la fuerza vital
vibrante.
La reacción totalmente explosiva de la mujer de la
sesión de grito primario aparece en la figura 11 -2B.
Está
experimentando numerosos sentimientos simultáneos que
explican los diversos colores, todos ellos de gran
intensidad, de manera que el aura aparece como brillo y
los fuertes rayos se emiten desde el cuerpo en líneas
rectas.
Una persona enfadada tiene un color rojo oscuro. Cuando
enpresa su ira, ésta surge de la persona en destellos
como relámpagos o chispas redondas que se desplazan de
su cuerpo, tal como se muestra en la figura 11-2C. Los
he visto muchas veces, en grupos y en sesiones.
Por contraste, la figura 11-2D muestra un ejemplo en el
que la persona no liberó su ira y su dolor. Cuando
surgió del área de la garganta, el punto rojo se
desplazó lentamente hacia fuera. A continuación, el
líder del grupo le hizo un comentario que, en mi
opinión, era doloroso. En ese preciso instante, el punto
rojo se des plazó rápidamente de regreso a su cuerpo y
penetró en el área de su corazón. Cuando lo golpeó,
rompió a llorar. No era un llanto catártico, sino más
bien como si dijera «pobre de mí, la víctima». Mi
interpretación de este hec hoes que se había apuñalado
el corazón con su propia ira.
El temor, por su parte, tiene un tono gris blancuzco y
punteado en el aura, como «pálido de miedo». Resulta muy
desagradable a la vista y tiene un olor repulsivo. La
envidia muestra un verde oscuro, sucio y pegajoso, como
«verde de envidia». La tristeza es gris oscura y densa,
como las nubes sombrías que se ciernen sobre
las cabezas de los personajes de los dibujos animados.
La frustración y la irritabilidad pueden presentar tonos
rojizos oscuros («rojo de ira»), pero la mayor parte de
las veces se manifiestan como vibraciones irregulares
que golpean el campo energético de otra persona
causándole desagradables sensaciones. Por lo general, un
amigo reacciona ante esta interferencia tratando de
provocar una expresión directa de los sentimientos
negativos, mucho más agradables de tratar. Por ejemplo,
si le decimos: «¿Estás enfadado?», el otro estalla rá
airadamente: «¡No!». De este modo se libera parte de
esta molesta interferencia.
Efectos de la droga sobre
el aura
Las drogas, como el LSD, la marihuana, la cocaína y el
alcohol son perjudiciales para los brillantes y saluda-
bles colores del aura y crean un «moco etéreo», como
sucede con la enfermedad. La figura 11-2E muestra el
efecto que provoca en el aura la aspiración de cocaína
por la nariz. Cada vez que esta persona lo hacía, los sá-
bados por la noche, presentaba en el lado derecho de la
cara y la cabeza una gran cantidad de moco gris eté-
reo, pegajoso, mientras que el izquierdo se matenía
relativamente limpio. Le pregunté si aspiraba más por
una ventanilla de la nariz que por la otra; pensaba que
no. Mis repetidas comparaciones (podía detectar cada vez
que lo hacía) y una descripción gráfica de su «moco
etéreo» le ayudaron a dejar el hábito.
La figura 11-2F muestra el aura de un hombre que se
había drogado frecuentemente con LSD y bebía mu-chísimo
alcohol. Su aura tiene una tonalidad pardoverdosa
oscura. El punto verde sucio, que se desplazaba
lentamente hacia abajo y no se liberaba, se relaciona
con sus sentimientos de ira, envidia y dolor
mezclados,sin diferenciar, retenidos. Tengo la seguridad
de que si hubiera podido separar estos sentimientos,
entendersus fundamentos, expresarlos y liberarlos, el
punto se habría fragmentado en tonalidades más claras y
brillantes de los colores correspondientes (rojo, verde
y gris), para desplazarse a continuación. Sin embargo,
debido a la cantidad de contaminación oscura de su
campo, este hombre debía hacer una amplia limpieza
energética para desprenderse de su moco etéreo antes de
que lograra elevar su nivel energético lo suficiente
para aclarar y desplazar sus sentimientos.
Un peso «aparente» en el
aura
La figura 11-2G muestra a un hombre que también había
sucumbido durante años a drogas tales como. el LSDy la
marihuana, con el consiguiente aura verde sucio. El
deterioró que suponen estas experiencias se muestraen el
lado superior derecho. Parece como si tuviera peso,
debido a que siempre inclinaba la cabeza en un án- gulo
que parecía equilibrar la forma. Ésta se mantuvo siempre
en la misma posición, una semana tras otra. Cuando se la
señalé, fue capaz de verla (utilizó un espejo). Para
retirar esta forma, tendría que dejar las drogas
y limpiar el campo, además de lo que se ha indicado
antes. Le recomendé que, además del trabajo
corporal,hiciera ayuno y siguiera una dieta limpiadora.
Entonces podría 'aumentar la fuerza de su campo
energético e irrumpir en este deterioro acumulado para
disiparlo.
En la figura 11-2H se observa un aspecto interesante del
peso «aparente» relacionado con la consistencia mu-
cosa. Esta mujer había sido el tipo clásico de una
«buena chica» durante años, pero acababa de rebelarse.
Dejó de ser tan «buena» y se mostró terriblemente airada
durante la sesión. Derribó las sillas de la habitación e
incluso entró a saco en la caja de pañuelos de papel
rompiéndolos en pedazos. Cuando salió de la sesión se
sentía liberada. Sin embargo, una semana más tarde se
concentró en un profundo retiro y acudió a mi consulta
con un terrible dolor de cabeza. Andaba con cuidado y
mantenía la cabeza hundida entre los hombros. En este
momento observé una gran «gota» de moco encima de su
cabeza. Aparentemente, lo liberó en la sesión v se había
acumulado allí. (Es bien conocido el fenómeno de la
liberación de toxinas como consecuencia del trabajo
bioenergético. En ocasiones, las personas «enferman»
después de un trabajo arduo.) Mi cliente ya no era
«rebelde», sino que daba muestras de un comportamiento
de autocastigo, en cierto modo maso
quista. Le sugerí que iniciara la sesión con movimientos
físicos. Le pedí que se inclinara por la cintura con
movimientos elásticos, como de latigazos. Al hacerlo, la
bola de moco saltaba hacia delante, hasta unos 75 cmde
ella. La mujer empezó a caer de bruces como si tirara de
ella un gran peso (figura 11-2H). Se controló y el moco
saltó a la parte posterior de su cabeza, como impulsado
por una goma elástica. Casi se cayó de es - paldas.
Estaba demasiado asustada para repetir el movimiento,
por lo que hicimos un prolongado trabajo corporal
centrándonos en que sintiera sus piernas mientras se
mantenía firmemente apoyada sobre los pies, conectada a
la tierra que la sostenía. Este proceso se denomina
«toma de tierra». Al término de la sesión, el moco se
había distribuido en una delgada capa sobre el cuerpo.
Le desapareció el dolor de cabeza. Liberarlade toda la
capa de moco costó varias semanas de trabajo corporal.
Ejercicio para experimentar
el peso aparente del campo energético
Un ejercicio que se realiza en las clases de aikido le
ayudará a experimentar el efecto del peso en el aura.
Sitúe a dos personas de pie junto a usted, una en cada
lado. Deben tratar de levantarle cogiéndole por el an-
tebrazo, en la parte delantera y en la trasera. Cuando
le agarren en estos ejercicios, asegúrese de que lo
hacen de forma que usted permanezca recto, sin que le
empujen primero hacia un lado, pues eso podría romper
sus raíces.
En primer lugar se hacen pruebas para ver cuánto pesa
usted y determinar si pueden levantarle con facilidad
odificultad. Ahora, tómese tiempo para enviar su campo
energético hacia arriba. Piense «en ascenso»,
concentrándose en el techo. Cuando se haya centrado
bien, convencido de que puede mantenerse allí, pídales
que traten de levantarle. ¿Result ó más fácil?
Concéntrese ahora en aumentar su conexión con el suelo.
Haga que le crezcan raíces desde las puntas de los dedos
y las plantas de los pies, profundizando en la tierra.
Concéntrese en la fuerte y poderosa conexión energética
que tiene con la tierra. Cuando se haya centrado muy
bien, pídales que intenten levantarle de nue- vo.
¿Resulta más pesado y difícil de levantar? Pro
bablemente.
«Formas de pensamiento disociado» en el aura A lo largo
de mis años de práctica bioenergética he observado un
fenómeno al que yo llamo «espacios móviles de realidad».
Considero que estos «espacios» son similares a los
descritos en los estudios topográficos, donde un «grupo»
o «campo» determinado contiene una serie de
características que definen las operaciones matemáticas
posibles dentro de dicho campo. En términos
de psicodinámica existen «espacios de realidad» o
«sistemas de creencias» que contienen grupos de formas
filosóficas asociadas con las concepciones acertadas y
erróneas de la realidad. Cada forma de pens ar contiene
sus propias definiciones de la realidad, como «todos los
hombres son crueles», «el amor es débil»,«controlarse da
seguridad y fuerza». Según mis observaciones, a medida
que la gente atraviesa su experiencia cotidiana se des
plaza también por los distintos «espacios» o niveles de
realidad definidos por estos grupos de formas de pensar.
Cada grupo o espacio de realidad experimenta el mundo de
forma diferente.
Estas formas de pensar son realidades energéticas,
observables, que irradian colores con diversas intensi-
dades. Su intensidad y su definición formal son el
resultado de la energía o la importancia que una persona
lesha concedido. Las formas de pensar son creadas,
construidas y mantenidas por sus poseedores mediante los
pensamientos habituales. Cuanto más definidos y claros
sean estos pensamientos, más definida será la forma.
La naturaleza y fuerza de las emociones asociadas con
los pensamientos dan a la forma su color, intensidad
ypotencia. Tales pensamientos pueden ser cons cientes o
no. Por ejemplo, se puede construir una forma de
pensamiento a base de pensar constantemente en algo
temido, como «me va a abandonar». El creador de la forma
de pensamiento actuará como si eso fuera a suceder. El
campo energético de la forma de pensar afectará
negativamente al campo de la persona a quien se refiere.
Cuanto más poder se le dé, aportándole energía
consciente o inconscientemente, más efectividad tendrá
en la creación del resultado temido. Por lo general,
estas formas de pensar forman parte de la personalidad
con tanta naturalidad que el individuo ni siquiera las
advierte. Empiezan a formarse en la infancia y se basan
en el razonamiento infantil, integrándose luego en la
personalidad. Son como una especie de equipaje extra que
la persona lleva en su interior de un lado a otro, sin
darse cuenta de su efecto, que es muy grande. Este
conglomerado de formas de pensar, o sistemas de
creencias, atrae muchos «efectos» a la realidad exterior
de uno.
Como quiera que estas formas no están profundamente
enterradas en el subconsciente, sino que se sitúan enel
límite de la conciencia, se pueden retirar empleando
métodos tales como el trabajo corporal energético de
núcleo, los juegos de asociación de palabras y la
meditación. Cuando las formas se atraen el enfoque de la
conciencia mediante la expresión de los sentimientos
asociados con ellas y la liberación de dichos sentimien-
tos, entonces se pueden cambiar. Este proceso permite
una visión más clara de la realidad que crea las formas.
Cuando se desvelan, se ven y se liberan los supuestos
invalidados (recuerde que están basados en la lógica
infantil), pueden ser sustituidos por una visión más
madura y clara de la realidad que, a su vez, conducea la
creación de experiencias vitales positivas.
Dentro de algunas personalidades estas formas están
interconectadas, y la conciencia personal rara vez se
en- cuentra sumergida por completo en un espacio sin
tener conocimiento de la mayoría de los demás, por lo
queel individuo mantiene un alto grado de integración en
su vida cotidiana.
Por otra parte, de un espacio de realidad a otro puede
fluir con facilidad un tipo distinto de personalidad,
pero sin tener conciencia de que exista alguna conexión
entre dichos espacios. Es posible que el sujeto no sea
capaz de integrar o entender este flujo dinámico y viva,
por tanto, confuso, sobre todo si se dispara
interiormente un determinado flujo cíclico crónico.
Puede encontrarse atrapado, entonces, en un flujo
automático secuencial que le lleva de un pensamiento al
siguient e mientras permanece desesperadamenteenmarañado
e incapaz de liberarse a sí mismo de este ciclo crónico
hasta que finaliza todo el proceso.
A continuación puede pasar a un estado distinto de
realidad sólo porque la acción cíclica del pensamiento
ha agotado toda la energía disponible. No sabrá cómo ha
salido de la pauta cíclica y, por tanto, probablemente
será incapaz de liberarse del ciclo la próxima vez que
se dispare. Estos estados de la realidad pueden ser eu-
fóricos, como aquel en el que una persona piensa que
logrará grandes cosas y se hará famosa o rica, pero no
tiene conciencia de la enorme cantidad de trabajo prác
tico que le espera antes de alcanzar dicha meta. O pue-
de tener el efecto contrario, en el que uno se ve a sí
mismo en un estado mucho peor que el real. En
cualquierade dichos estados, el sujeto probablemente
sólo ve una parte de sí mismo, exagerándola. Puede tener
el potencial necesario para crear todas las grandes
cosas que ve para sí mismo en el primer estado, pero
necesitará mucho trabajo y tiempo. Por otra parte, en el
segundo estado negativo, ve la parte de sí mismo que
necesita cambiar, pero se olvida de que ese cambio es
posible.
En su libro How to Read the Aura, William Butler indica
que las formas particulares de pensamiento se mantienen
estacionarias en el campo energético hasta que una
entrada interna o externa de energía las dispara.
Entonces, estas formas se desplazan por el aura en una
secuencia crónica, pero no son liberadas. Simplemente se
descartan a sí mismas y quedan en estado latente
recuperando la energía suficiente para desplazarse de
nuevo. Las formas de pensar acopian energía a través de
los pensamientos semiconscientes habituales del
individuo y otros sentimientos afines. También la acu-
mulan atrayendo pensamientos y sentimientos similares de
otras personas. Dicho de otro modo, si usted
se juz ga continuamente a sí mismo sobre algo, sus
acciones y sentimientos seguirán a sus juicios ypronto,
a través de ambas instancias, los demás, sus conocidos,
entrarán en el cuadro y estarán de acuerdo con usted,
enviándole energía en forma de pensamientos y
sentimientos que estarán de acuerdo con los suyos. Por
ejemplo, si usted se repite constantemente que es tonto,
poco fiable, feo o gordo, los demás no tardarán en estar
de acuerdo con usted. La energía de aquéllos se añade a
la que usted tiene acumulada hasta que su forma de
pensar tiene energía suficiente (alcanzando la masa
crítica) para dispararse. Entonces caerá en un estado en
el que llegará al convencimiento de que es tonto, feo,
poco fiable o gordo, hasta que la energía de su forma de
pensar se disipe momentáneamente. Por supuesto, también
es posible que atraiga usted un acotencimiento externo
capaz de disparar dichar forma de pensar con una
explosión de energía. El proceso es el mismo en ambos
casos. Un disparo semejante no es necesariamente
negativo, pues si el individuo se encuentra en proceso
terapéutico puede salir de su ciclo crónico y fragmentar
la forma cíclica lo suficiente como para manejarla muy
bien la próxima vez que se dispare.
Si el terapeuta es capaz de percibir estas realidades y
las describe o ayuda al cliente a describirlas,
podráayudar a éste a liberarse mientras pasa de una
realidad a la siguiente. La descripción que haga el
terapeuta de cada estado de la realidad, tal y como su
cliente la ex perimenta, dará a éste una visión de
conjunto de todo el proceso. Dicha visión global ayudará
al paciente a crearse un observador objetivo interno que
también puede definir cada uno de los espacios a medida
que entra y sale de ellos. Con este trabajo, cliente y
terapeuta serán capaces de definir con mayor claridad el
ciclo crónico del primero y encontrar juntos una salida.
Luego podrán buscar la forma de romperlo la próxima vez
que se inicie.
Por ejemplo, cuando un cliente particularmente es
quizoide (véase el capítulo 13) sufre un ataque de este
tipo, lo único que hago es dirigirme a una pizarra y
empezar a dibujar y etiquetar estas formas en el momento
en que las expresa. Mientras expresa en voz alta sus
pensamientos trazo una flecha desde un pensamiento al
siguiente. Pronto se encuentran en la pizarra todos los
pensamientos cíclicos. La superficie exterior de estas
formas suele ser bastante limitada, lo que quiere decir
que el cliente experimenta una realidad muy estrecha en
la que las definiciones y/o las distinciones se
consideran negativas y, en ocasiones, categóricas: por
ejemplo, que todas las personas parecen estar lejos o,
incluso, que son peligrosas. También puede ocurrir que
el cliente crea que es una víctima de la vida. El punto
crucial es aquel en el que el paciente es capaz de
retener uno de los pensamientos con un contenido
emocional particularmente fuerte durante el tiempo
suficiente para expresar la emoción. Por logeneral, si
el individuo es capaz de tolerar la ira o el dolor
asociados con el pensamiento, podrá romperlo y conectar
con niveles más profundos dentro de su forma de pensar.
Figura 11-3: Forma de pensamiento disociado
La figura 11-3 muestra un ejemplo de este tipo. En es te caso
particular la cliente contemplaba cómo iba dibujando yo las formas y
podía ver el cuadro completo. Esta mayor comprensión ayudó a la
mujer a concentrarse y liberarse de su ciclo crónico. Examinó los
momentos de su ira, la expresión y vio que se implicaban cuestiones
más profundas. Gran parte del nivel exterior de esta forma
particular de pensamiento es la máscara en la que la persona parece
no ver o asumir la propia res ponsabilidad; en vez de ello, echa la
culpa a otros. Lo hace para parecer «buena», lo que, naturalmente,
la deja impotente hasta que alcanza la realidad más profunda, que es
el núcleo de la forma de pensar. Cuando sintió, como consecuencia de
un trauma infantil, que interiormente era «mala» y que nada podía
hacer
al respecto, mi cliente entendió que en el futuro tenía la opción de
ver y comprender toda la estructurasumiéndose primero en su ira
cuando se sentía atrapada, y penetrando luego en el dolor inherente
a esa forma de pensamiento. Por lo general, evitaba el dolor
manteniéndose en la superficie de la forma de pensamiento (y, por
tanto, en lo irreal). Sintiendo el dolor es capaz de integrar la
niña que lleva dentro, que se siente «mala», con la mujer adulta
interior, que sabe que no lo es.
Por lo general, la clave para romper con una pauta de pensamiento
cíclico está en expresar y liberar los sen- timientos. En la mayoría
de los casos, estas formas se han disociado, en primer lugar, para
que la persona no experimente los sentimientos contenidos en ella.
El individuo dedica gran cantidad de esfuezos durante su vida
cotidiana a evitar que esa forma de pensar se ponga en movimiento,
porque le evoca unos sentimientos indeseables. Aun cuando la persona
evita las situaciones que pueden evocar dichos sentimientos, el
resultado
no es del todo satisfactorio, ya que continuamente está recargando
las formas de pensar. Mientras un individuoprosigue con su proceso
terapéutico, la forma se va conectando cada vez más con el resto de
la per- sonalidad a medida que pasa el tiempo; los aspectos
negativos se transforman en funciones positivas yse integran con el
aura «normal» de la persona como colores claros y brillantes sin
forma.
Figura 11-4: Hombre trabajando en un taburete bioenergético
Limpieza del aura durante una sesión
terapéutica
La terapia energética de núcleo ha sido proyectada para ayudar a la
gente a liberar los bloques de su campo aural mediante el enfoque y
el ejercicio físico. La figura 11-4 ilustra esta liberación. Al
estar tumbado de espaldas sobre un taburete almohadillado, los
múscuios del torso se estiran y empiezan a relajarse. Esto provoca
una liberación energética y hace que el bloque se vaya. Este
paciente tenía un fuerte bloque energético en los músculos situados
delante de la columna vertebral, cerca de la articulación
diafragmática. Mientras trabajaba en el taburete bioenergético, el
bloque se liberó súbita- mente con una explosión de energía. La
«nube energética» ascendió rápidamente por la espina dorsal. Cuando
llegó a su cabeza y se abrió paso en su conciencia, observé que
pasaba a otro espacio de la realidad. Empezó a llorar y a expresar
dolores de su primera infancia. Conforme daba rienda suelta a sus
sentimientos liberaba una nube energética cada vez mayor que se
desplazaba fuera de su campo.
La descripción que sigue es lo que sucede durante una sesión
terapéutica típica. Ofreceré, en primer lugar, algunos antecedentes
sobre mi cliente, a la que llamaré Susan.
Susan era una bella muchacha rubia algo menor de treinta años,
terapeuta, casada y madre de una niñade dos años. Ella y su esposo,
terapeuta igualmente, formaban una pareja muy fructífera y estable y
ejercían un papel de liderazgo entre sus colegas. Se habían conocido
y casado muy jóvenes. El padrede Susan murió en un accidente poco
antes de nacer ella, dejando a la madre a cargo de la recién nacida
y dos niños pequeños. Los ingresos de la madre eran escasos, o
nulos, y tuvo que pedir a otras personas que cuidaran de Susan. La
muchacha, por tanto, creció en dos hogares: uno muy limpio, ordenado
y profundamente cristiano, y el otro, el hogar materno,
descompuesto. Su madre no logró restañar la herida que le produjo la
muerte de su esposo en un momento tan importante. No volvió a ca-
sarse, pero tuvo muchos amantes.
El temprano casamiento de Susan satisfizo la necesidad que tenía de
un hombre que la cuidara, ya que,en realidad, nunca tuvo padre. Por
otra parte, Susan abrigaba el temor de que nunca lograría
prosperaren el matrimonio (como su madre), o que tendría que ser
perfecta para lograrlo (como le sucedía en la familia religosa).
Cuando llegó cierta mañana para realizar su sesión, Susan parecía
pletórica de felicidad y alegría. Habló de la semana que había
pasado con su marido. Al hacerlo, movía los brazos y arrojaba una
nube rosada y blanca de «felicidad» (figura 11-5). Sin embargo, esta
felicidad le servía para encubrir otros sentimientos más profundos
que su campo energético delataba. Las observaciones me demostraron
que había un bloque, que aparecía como un punto gris oscuro en el
plexo solar (el área del estómago), relacionado con el miedo y otros
sentimientos. El bloque secundario estaba en la frente (gris claro,
indicativo de una confusión mental), y que se conectaba directamente
con el dolor emocional del corazón (rojo). Presentaba una
extraordinaria actividad mental (alta energía) en los lados de la
cabeza
(amarillo). Tenía, además, una gran cantidad de energía vi brante de
vida sexual en la pelvis (rojo-naranja).
Mientras seguía agitando los brazos y hablando alegremente hasta el
extremo de arrojar suaves nubes rosadas y blancas, la brillante
energía amarilla que irradiaba por los lados de la cabeza empezó a
cubriro enmascarar el área problemática de su frente, de color gris.
Estaba, literalmente, convenciéndose a sí misma de que era feliz,
enmascarando el gris con la energía amarilla (mental). Cuando le
describí lo que veía, dejó inmediatamente de crear la nube rosada
«falsa» y el área gris de su cabeza recuperó su tonalidad original.
La compostura de Susan cambió por completo, pasando a mostrar temor
y dolor emocional. Entoncesempezó a confiarme lo que realmente
estaba pasando. Poco antes de acudir a su sesión semanal, Susan
había sabido que su madre estaba hospitalizada con cierta clase de
parálisis en los ojos. El médico le apuntó que se trataba de un
síntoma de algo grave, quizá de esclerosis múltiple. La situación
alteró profundamente a Susan y tuvo que recurrir a toda su fuerza
para soportar los variados sentimientos que sentía hacia su madre.
Al bloquear su energía de vida sexual en la pelvis y no permitir que
le fluyera por las piernas, se bloqueaba a sí misma en relación con
el suelo y con su base como ser humano sobre la tierra. Por tanto,
en este punto de la sesión era importante hacer descender dicha
energía hacia la tierra y conectarla con su base energética, la
fuerza de sus piernas y de la pelvis.
A base de ejercitar ambas partes empezamos a des plazar la energía
pélvica piernas abajo para formarla base donde realizar trabajos más
difíciles. Esta energía descendió rápidamente por sus extremidades
para conectarla con el suelo. A continuación fluyó por todo su
cuerpo y cargó el sistema de forma más equilibrada. Mientras se
liberaba el bloque pélvico, el cambio en la energía le dio una
sensación de seguridad dentro de sus propios sentimientos de fuerza
sexual y vital. El bloque pélvico guardaba relación con su madre,
incapaz de controlar adecuadamente su energía sexual. Susan seguía
teniendo miedo a ser como su madre; sin embargo, puesto que su
conexión corazón-sexo era fuerte, no existía
un peligro real en este sentido, lo cual explica que la energía se
desplazara con tanta rapidez por suspiernas para penetrar en la
tierra. Una vez enterrada esa energía, Susan supo que podía tener
sentimientos placenteros y controlarlos, de manera que podía hacer
lo que quisiera con ellos.
A continuación, Susan tuvo la capacidad necesaria para hablar sobre
el dolor que sentía su corazón por la enfermedad materna. Empezó a
llorar, y con ello liberó el rojo de su zona cardiaca. Procedimos
entoncesa trabajar con el bloque principal situado en el plexo
solar, relacionado con sus necesidades infantilesinsatisfechas, lo
que, a su vez, hacía que rechazara a su madre. De este modo, el
campo energético revelaba su conflicto interno. Por una parte tenía
sentimientos dolorosos y amorosos hacia su madre, gravemente enferma
a la sazón; por otra, sentía la ira del rechazo, como si dijera: «Si
no te has preocupado por mí, ¿por qué he de preocuparme yo por ti?».
Al conducir este conf licto a la conciencia y la comprensión empezó
a liberar el área gris de su frente. La liberación del punto oscuro
de su plexo solar exigió un gran trabajo corporal. Susan se recostó
de espaldas sobre el taburete bioenergético para estirary soltar el
bloque; realizó luego grandes esfuerzos moviendo el torso hacia
delante y hacia abajo pararegurgitar el bloque con todo lo que
simbolizaba: no sólo el rechazo de su madre, sino también el deseo
de
Susan de culparle de todas las privaciones que había sufrido. Susan
mantenía un estado de privación«seguro» en su vida actual; había
sustituido las privaciones sufridas en la niñez por las que se
imponía así misma. El punto oscuro (de 10 cm de diámetro) del plexo
solar se aclaró y ex tendió para formar un área más amplia (20 cm de
diámetro), pero una parte permanecía dentro del campo energético, lo
que indicaba que todavía no se había resuelto totalmente la
cuestión. Costaría tiempo liberar este punto oscuro, ya que contenía
aspectos importantes de su vida.
A lo que me refiero al hablar de un estado de privación «seguro» es
que la joven se sentía cómoda conciertas privaciones que le parecían
normales. Los seres humanos nos sentimos más seguros en lo que
consideramos la norma, tanto si es realmente normal como si no; esa
norma se establece en nuestro entorno infantil.
Por ejemplo, en el caso de Susan, la «norma» se manifestaba a través
de su espacio vital. Siendo niña sesentía confusa sobre su hogar.
¿Cuál era realmente? Ninguno de los dos. El problema persis tió
posteriormente. Había vivido en una casa inacabada casi la totalidad
de sus ocho años de matrimonio. En realidad, nunca había terminado
de crear y amueblar su propio hogar.
A medida que progresaba la terapia, el espacio vital de Susan se
convirtió en algo armoniosamente ordenado y bellamente acabado. En
su caso, era de hecho la manifestación exterior de su estado
interno.
A través de estas observaciones del campo energético el lector
estará empezando a ver con mayor claridad, probablemente, la
conexión entre la enfermedad y los problemas psicológicos.
Detenemosnuestros sentimientos bloqueando nuestro flujo energético.
Se crean así unos estancamientos energéticosen nuestros sistemas que
se mantienen hasta enfermar el cuerpo físico. De ello hablaremos con
más extensión en la Cuarta parte. La conexión entre la terapia y la
curación se evidencia cuando se considerala enfermedad de este modo.
La amplia visión del sanador abarca la totalidad del ser humano. En
la curación no se separan el cuerpo y la ment e, las emociones y el
espíritu: todo ello debe estar equilibrado para crear un ser humano
saludable. El sanador se centra en el mal funcionamiento físico,
psicológico y espiritual. Es imposible curar sin afectar los niveles
psicológicos de la personalidad. Cuanto mejor entienda el terapeuta
la psicodinámica de sus clientes, mejor equipado estará para ayudar
a sus pacientesa curarse a sí mismos.
Revisión del capítulo 11
1. ¿Qué es un bloque energético?
2. ¿Cómo se crea un bloque energético en el CEH?
3. ¿Cómo puede decir cuándo se ha liberado un bloque del CEH?
4. ¿Cuándo puede decir que alguien libera sus senti mientos en vez
de retenerlos?
5. ¿Qué fenómeno se presenta primero: el aura( o el físico?
6. ¿En qué color o colores se presentan en el aura las siguientes
emociones: miedo, ira, amor, alegría, confusión, envidia, odio?
7. ¿Qué color es el mejor del aura: rojo brillante y vi brante cerca
de la pelvis, o verde agradable eintenso cerca del área del tórax
-plexo solar?
8. ¿Cuál es el efecto que prod uce en el aura el hecho de fumar
marihuana? ¿Durante poco tiempo?¿Durante mucho tiempo?
9. ¿Qué es una forma de pensamiento disociado?
Alimento para la mente
10. Haga ejercicios (observando las auras de otras personas)
y describa lo que ve.
11. Trace, de principio a fin, el ciclo de una de las formas
de pensamiento que le asalten. ¿Cómo se inició? ¿Cuál es su
origen? ¿Cómo puede liberarse? ¿Qué sen timientos más
profundos cubre evitando
su conciencia de los mismos?