Capítulo 7
EL CAMPO ENERGÉTICO HUMANO, O AURA
HUMANA
El campo energético humano es una manife stación de energía
universal íntimamente vinculada con la vida humana. Usualmente se
denomina aura, y ha sido descri to como un ente luminoso que rodea
el cuerpo físico y penetra en él, y que emite su propia radiación
característica.
El aura es la parte del CEU asociada
con los ob jetos. El aura humana, o campo energético humano
(CEH), es la parte del CEU relacionada con el cuerpo humano.
Basándose en sus observaciones, los investiga dores han
creado modelos teóricos que dividen el aura en varias capas,
a veces denominadas cuerpos, que se interpenetran y rodean
mutuamente en capas sucesivas. Cada cuerpo subsiguiente está
compuesto por sustan cias más finas y «vibraciones» más
altas que el cuerpo al que rodea y en el que penetra.
Ejercicios para visualizar el aura humana
Los ejercicios que a continuación se exponen constituyen
la forma más sencilla de empezar a detectarel CEH. Si se
encuentra con un grupo de personas, formen un círculo
cogiéndose de las manos. Deje que la energía de su campo
aural fluya por el círculo. Sienta por unos momentos
este flujo palpitante.
¿Qué dirección sigue? Pre gunte a su vecino en qué
dirección siente que va. ¿Se corresponden?
Ahora, sin introducir cambios ni mover las manos,
detenga el flujo de energía. Manténgalo inmóvil durante
un rato (todos al mismo tiempo) y déjelo fluir de nuevo.
Pruebe otra vez. ¿Nota la diferencia?
¿Cómo le gusta más? Haga ahora lo mismo con una persona
sola. Siéntense frente a frente juntando las palmas de
las ma nos. Deje que la energía fluya c on naturalidad.
¿En qué dirección va? Mande la energía por la palma
izquierda y deje que vuelva por la derecha. Inviértalo.
Ahora detenga el flujo. Pruebe entonces a hacerlo fluir
por am bas manos a un tiempo. Aspírelo ahora con las dos
ma nos a la vez. Empujar, tirar y parar son las tres
formas básicas de manipular la energía en la curación.
Practíquelas.
Deje caer las manos; mantenga las palmas separadas entre
5 y 12 cm; muévalas lentamente reduciendo y am pliando
el espacio entre ellas. Intente crear al go entre las
manos. ¿Puede sentirlo?
¿A qué se parece? Separe entonces las manos aún más,
hasta 20 o 25 cm. Ahora, lentamente, vaya acercándolas
hasta que sienta una pre sión en sentido contrario, de
manera que tenga que ha cer un poco más de fuerza para
unirlas. Acaba de tocar los bordes de uno de sus cuerpos
energéticos. Si tiene las manos separadas entre 2,5 y 3
centímetros, lo que ha tocado han sido los bordes de su
cuerpo etéreo (primera capa del aura). Si la distancia
entre las manos es de 7,5 a 10 c m, ha tocado los bordes
exteriores de su cuerpo emocional (segunda capa del
aura). Acerque ahora las manos con sumo cuidado hasta
que pueda sen tir realmente el borde exterior del cuerpo
emocional o campo energético de la mano derecha tocando
la piel de la mano izquierda. Aproxime la palma derecha
unos dos o tres centímetros hacia la izquierda. Sienta
el hormigueo en el dorso de la mano izquierda cuando la
toca el borde de su campo energético. ¡El campo
energético de la mano ha atravesado la mano izquierda!
Separe a continuación las manos y manténgalas a una
distancia de unos 18 cm. Apunte con el índice de la mano
derecha a la palma izquierda, asegurándose de que la
punta del dedo está separada de1,25 a 2,5 cm de la
palma. Trace círculos sobre las palmas. ¿Qué siente? ¿Un
cosquilleo? ¿De qué se trata?
Reduzca la luz de la habitación y mantenga las manos de
manera que las puntas de los dedos seapunten mutuamente.
Coloque las manos delante de la cara a unos 60 cm de
distancia. Asegúrese de que la pared del fondo sea
blanca y lisa. Relaje la vista y mire suave mente el
espacio entre los dedos, que deben estar separados entre
2,5 y 1,25 cm. No mire hacia ninguna luz brillante. Deje
descansar la vista. ¿Qué ve? Acerque las puntas de los
dedos y vuélvalas a sep arar. ¿Qué está sucediendo en el
espacio que hay entre los dedos? ¿Qué ve alrededor de la
mano? Desplace lentamente una mano hacia arriba y la
otra hacia abajo de forma que los dedos enfrentados sean
distintos. ¿Qué ha sucedido
ahora? Alrededor del 9501o de las personas que prueban
este ejercicio ve algo, y todas sienten algo.
Para hallar las respuestas a tales preguntas, consúltese
la parte fi nal del capítulo.
Una vez que haya practicado estos ejercicios y los del
capítulo 9, sobre la observación de las auras de otras
personas, puede empezar a ver las primeras capas del
aura, como se indica en la figura 7-1 A. Más tarde, una
vez que se haya acostumbrado a ver las capas inferiores,
puede practicar los ejerciciosde elevada percepción
sensorial que se describen en los capítulos 17, 18 y 19.
Abriendo más el tercerojo (sexto chakra), empezará a ver
los niveles superiores del aura (figura 7-1B.
Ahora que la mayoría de los lectores han sentido, visto
y experimentado los niveles inferiores del aura, pasemos
a describirlos.
La anatomía del aura
Se distinguen numerosos sistemas creados a partir de la
observación' para definir el campo aural Todos ellos
dividen el aura en capas y definen éstas por sus
posiciones, color, brillantez, forma, densidad, fluidez
y función. Cada sistema está dirigido a la clase de
trabajo que el individuo está «cumpliendo» con el aura.
Los dos sistemas más parecidos al mío son el que emplea
Jack Schwarz, que tiene más de siete capas y se describe
en su libro Human Energy Systems, y el empleado por la
reverenda Rosalyn Bruyere, del Healing Light Center de
Glendale, California. Su sistema es de siete capas y lo
ha descrito
en la obra Wheels of Light, a Sudy of the Chakras.
Las siete capas del campo
aural
Durante mis trabajos como consultora y sanadora he
observado siete capas. En principio sólo podía verlas
más bajas, que son las de mayor densidad y más
fácilmente perceptibles. A medida que avanzabaen mis
trabajos iba percibiendo más capas. Cuanto más elevada
era la capa, mayor era la necesidad de expandir mi
conciencia para detectarla. Es decir, que para percibir
las capas superiores, como la quinta,la sexta y la
séptima, tenía que sumirse en un estado meditativo, por
lo general con los ojos cerrados.
Tras dos años de práctica empecé a ver más allá de la
séptima, como explicaré brevemente al final de este
capítulo.
Mis observaciones del aura me revelaron un interesante
dibujo dualista del campo. Las capas alternasdel campo
están altamente estructuradas, mientras que las
intermedias parecen estar compuestas por fluidos
coloreados en constante movimiento. Estos fluidos
atraviesan la forma establecida por las tornasoladas
ondas luminosas permanentes. La dirección del flujo está
regulada en cierto modo por la forma de la luz
permanente, ya que pasa a través de sus líneas
luminosas. También las formas permanentes de luz
propiamente dichas son centelleantes, como si estuvieran
formadas por hileras de numerosas lucecitas diminutas
que parpadean con rapidez, cada una a una velocidad
distinta. Las líneas luminosas permanentes parecen
poseer diminutas cargas que las recorren.
Así, la primera, tercera, quinta y séptima capas tienen
una estructura definida, mientras que la segunda,la
cuarta y la sexta están compuestas por sustancias
semejantes a fluidos, sin estructura determinada. Cobran
forma por el hecho de que atraviesan la estructura de
las capas impares y, por ello, adoptan en cierto modo la
de las capas estructuradas. Cada capa sucesiva penetra y
atraviesa por completo todas
las situadas debajo, incluyendo el cuerpo físico. Así,
el cuerpo emocional se extiende más allá delcuerpo
etéreo, e incluye tanto a éste como al cuerpo físico. En
realidad, ninguno de los cuerpos es una«capa», aunque
sea así como lo podemos percibir, sino una versión más
expansiva de nuestro yo que lleva dentro otras formas
más limitadas.
Desde el punto de vista del científico, cada capa puede
ser considerada como un nivel de vibraciones más altas,
que ocupan el mismo espacio que los niveles de vibración
situados debajo y que se extienden más allá. Para
percibir las capas de forma consecutiva, el observador
debe aumentar su conciencia a cada nuevo nivel de
frecuencia. Tenemos, por tanto, siete cuerpos, todos los
cuales ocupan el mismo espacio simultáneament e, cada
uno extendiéndose más allá del último, algo a lo queno
estamos acostumbrados en la vida cotidiana «normal».
Muchas personas estiman, de manera equivocada, que el
aura se puede despojar de capas consecutivas, como se
hace con una cebolla, pero noes así.
Las capas estructuradas contienen todas las formas del
cuerpo físico, incluyendo sus órganos internos, vasos
sanguíneos, etc., además de otras formas adicionales de
las que carece éste. Existe un flujo vertical de energía
que palpita hacia arriba y hacia abajo por el campo en
la espina dorsal. Se extiendeal exterior, más allá del
cuerpo físico, por encima de la cabeza y por debajo del
cóccix. Yo la denomino corriente de fuerza vertical
principal. El campo presenta torbellinos turbulentos de
forma cónica denominados chakras. Sus puntas señalan
hacia la corriente de fuerza vertical principal, y sus
extremos abiertos hacia el borde de cada capa del campo
en el que están situados.
Las siete capas y los siete
chakras del campo aural
Cada capa parece distinta y tiene su propia función.
Cada capa del aura está relacionada con un chakra.
Es decir, la primera capa está asociada con el primer
chakra, la segunda con el segundo chakra, y así
sucesivamente. Se trata de conceptos genéricos que se
complicarán muchísimo a medida que profundicemos en el
tema. Por el momento, nos limitaremos a relacionarlos
para dar una visión de conjunto. La primera capa
delcampo y el primer chakra están relacionados con el
funcionamiento del cuerpo y la sensación física(sentir
dolor o placer físicos). La primera capa guarda relación
con el funcionamiento automático y autónomo del cuerpo.
La segunda capa y el segundo chakra se relacionan, en
general, con el aspecto emotivo de los seres humanos.
Son vehículos de nuestra propia vida y de nuestros
sentimientos emocionales. La tercera capa está asociada
con nuestra vida mental, con el pensamiento lineal. El
tercer chakra está relacionado con el pensamiento
lineal. El cuarto nivel, que se relaciona con el chakra
del corazón, es el vehículo por medio del cual amamos,
no sólo a nuestra pareja, sino a la humanidaden general.
El cuarto chakra es el que metaboliza la fuerza
amatoria. Por su parte, el quinto nivel estárelacionado
con una voluntad más elevada que tiene mayor conexión
con la voluntad divina, y el quinto chakra se asocia con
el poder de la palabra, dando ser a las cosas mediante
ella, escuchando y aceptando la responsabilidad por
nuestras ac ciones. El sexto nivel y el sexto chakra
están asociados conel amor celes tial, que se extiende
más allá del alcance del amor humano, abarca toda la
vida y establece
una declaración de cariño y apoyo para la protección y
el alimento de toda vida. Mantiene todas las formasde
vida como precisas manifestaciones de Dios. Finalment e,
la séptima capa y el séptimo chakra guardan relación con
el pensamiento elevado, el conocimiento y la integración
de nuestra formación espiritual y física.
Existen, por tanto, lugares específicos dentro de
nuestro sistema energético para las sensaciones ,
lasemociones, los pensamientos, los recuerdos y otras ex
periencias no físicas de las que damos cuenta a nuestros
médicos y terapeutas. La comprensión de la forma en la
que nuestros síntomas físicos están relacionados con
estas posiciones nos ayudará a comprender la naturaleza
de las distintas dolencias, y la diferencia entre los
estados de salud y de enfermedad. De este modo, el
estudio del aura puede ser un puente entre la medicina
tradicional y nuestras preocupaciones psicológicas.
Posición de los siete
chakras
La posición de los siete chakras mayores en el cuerpo
físico, como se ve en la figura 7-2A, corresponde a los
principales plexos nerviosos del cuerpo en dicha zona
corporal.
En su libro Radionics and the Subtle Bodies of Man, el
doctor David Tansely, especialista en radiónica, dice
que los siete chakras mayores se forman en los puntos en
que las líneas permanentes de luz se entrecruzan 21
veces.
Los 21 chakras menores se encuentran situados en puntos
en que los ramales de energía se cruzan 14 veces. (Véase
figura 7-2B.) Sus posiciones son las siguientes: uno
delante de cada oreja, uno encima de cada tetilla, uno
donde se unen las clavículas, uno en la palma de cada
mano, uno en la planta de cada pie, uno justamente
detrás de cada ojo (no se muestran), uno relacionada con
cada gónada, uno cerca del hígado, uno conectado con el
estómago, dos conectados con el bazo, uno en cada corva,
uno cerca del timo y uno cerca del plexo solar. Estos
chakras sólo miden unos 7,5 cm de diámetro y se
encuentran a unos 2,5 cm de distancia del cuerpo. Los
dos chakras menores situados en las palmas de las manos
son muy importantes para la curación. Donde las líneas
de energía se cruzan siete veces se crean torbellinos
todavía más pequeños. Existen muchos centros de fuerza
diminutos en los puntos donde estas líneas se cruzan
menor número de veces. Tansely dice que estos minúsculos
torbellinos pueden muy bien corresponderse con los
puntos de acupuntura de la medicina china.
Cada chakra mayor de la parte delantera del cuerpo tiene
su par en el dorso y ambos juntos se considerancomo
manifestaciones de un solo chakra. Los aspectos
frontales están relacionados con los sentimientosde la
persona, los dorsal Íes con su voluntad, y los tres de
la cabeza con sus procesos mentales. Todos ellos
aparecen en la figura 7-3. Así, el chakra nº2 tiene un
componente 2ª y 2B, y el nº3, un componente
3A y 3B, y así sucesivamente hasta el sexto chakra. Se
puede considerar, si se desea, que los chakras 1 y7
están apareados, puesto que son puntas abiertas de la
principal corriente de fuerza vertical que recorre
arriba y abajo la espina dorsal, a cuyo interior señalan
todos los chakras.
Donde conectan
con la principal corriente de fuerza, las puntas o extremos de los
chakras se denominan raíces o núcleos de éstos. Dentro de estos
núcleos se encuentran sellos que controlan el intercambio de energía
entre las capas del aura a través del chakra en cuestión. Es decir,
cada uno de los siete chakras tiene siete capas, y cada una de éstas
se corresponde con una capa del campo aura!. Cada chakra tiene
un aspecto distinto en cada una de estas capas, como se verá cuando
las des cribamos detalladamente. Laenergía puede fluir de una a otra
capa a través del chakra, pasando por los sellos de las raíces de
los chakras. La figura 7-4 muestra el campo aural con las siete
capas interpenetrantes y las siete capas de chakras interpenetrantes.
Figura 7-2: Posición de los chakras
(Vista diagnóstica)
A. Los siete chakras mayores B. Los veintiún chakras menores
Se puede ver la energía que fluye al interior de estos chakras desde
el campo energético universal (figura7-3). Cada torbellino
turbulento de energía parece aspirar o recoger energía del CEU. Su
funcionamientose asemeja al de los torbellinos conocidos de agua o
aire, como remolinos, ciclones, trombas marinas y huracanes. El
extremo abierto de un chakra normal en la primera capa del aura mide
unos 15 cm de diámetro a una distancia de 2,5 cm del cuerpo.
La función de los siete chakras
Cada uno de estos torbellinos intercambia energía con el CEU. Por
tanto, cuando se sienten «abiertos» se trata de una sensación
literalmente cierta. Todos los chakras mayores, los menores, los
inferiores y los puntos de acupuntura son aberturas por donde lfuye
la energía a y desde el aura. Somos como esponjasen el mar de
energía que nos rodea. Como ésta siempre se asocia con alguna forma
de conciencia, experimentamos la energía que intercambiamos en
términos de ver, oír, sentir, intuir o conocer directamente.
Por tanto, podemos considerar dos significados en el hecho de
permanecer «abiertos». Significa, en primer lugar, metabolizar una
gran cantidad de energía desde el campo universal a través de todos
los chakras, grandes y pequeños. Por otra parte, significa ceder, y
en cierto modo tratar, toda la conciencia relacionada con la energía
que fluye a través de uno. No es tarea fácil, y la mayoría de
nosotros nopodemos realizarla. El material psicológico relacionado
con cada chakra se lleva a la conciencia aumentando el flujo de
energía de uno mismo a través de dicho chakra. Un repentino flujo de
energía liberaría demasiado material psicológico, por lo que no
podríamos procesarlo todo. Por tanto, en cualquiera
de los procesos de crecimiento en que nos hallemos, hemos de
trabajar para abrir lentamente cada chakra a fin de disponer de
tiempo para procesar el ma terial personal que se libera e integrar
la nueva información en nuestra vida.
Figura 7-3: Los siete chakras mayores; vistas frontal y posterior
(Vista diagnóstico)
Figura 7-4: El sistema del cuerpo aural de siete capas
(Vista de diagnóstico)
Es importante abrir los chakras y aumentar nuestro flujo energético,
ya que cuanta más energía dejemos fluir más sanos nos encontraremos.
La enfermedad del sistema la provoca un desequilibrio de energía o
un bloqueo del flujo energético. Dicho de otro modo, la falta de
flujo en el sistema energético humano conduce indefectiblemente a la
enfermedad, además de deformar nuestras percepciones y embotar
nuestras sensaciones, interfiriendo así en una experiencia serena de
vida plena. Sin embargo,no estamos psicológicamente preparados para
permanecer abiertos sin trabajar y desarrollar nuestramadurez y
claridad.
Cada uno de los cinco sentidos está asociado con un chakra: el tacto
con el primero; el oído, el olfato yel gusto con el quinto (el
chakra de la garganta); y la vista con el sexto (o tercer ojo). En
el capítulo dedicado a la percepción se comenta todo esto en
detalle.
Los chakras del cuerpo aural tienen tres funciones principales:
1. Revitalizar cada cuerpo aural y, con ello, el cuerpo físico.
2. Provocar el desarrollo de distintos aspectos de la
autoconciencia. Cada chakra está relacionado con una función
psicológica específica. El capítulo 11 trata de los efectos
psicológicos que tiene la aperturade chakras específicos en los
cuerpos etéreo, emocional y mental.
3. Transmitir energía entre los niveles aurales. Cada capa aural
tiene su propio juego de siete chakras mayores, cada uno situado en
el mismo lugar en el cuerpo físico. Ello es posible porque cada capa
progresiva existe en octavas de frecuencia siempre crecientes. Por
ejemplo, para el cuarto chakra hay realmente siete chakras, cada uno
de una banda de frecuencia más alta que el inferior. Los chakras
parecen estar alojados uno dentro de otro, como si fueran vasos
encajados. Cada cha kra de cada capa superior se extiende más lejos
en el campo aura] (hasta el borde de cada capa) y es ligeramente más
ancho que el situado debajo.
La energía se transmite de una capa a la siguiente a través de
pasajes situados en las puntads de loschakras. La mayoría de las
personas tienen sellados estos pasajes. Se abren como resultado del
trabajode purificación y, por tanto, los chakras se convierten en
trans misores de energía de una capa a otra. Cada chakra de la
etérea está directamente conectado al mismo chakra del siguiente
cuerpo más fino que lo rodea y lo penetra. Los chakras del cuerpo
emocional están conectados a los del siguiente cuerpo más fino, el
mental, y así sucesivamente para las siete capas.
En la literatura esotérica oriental se considera que cada uno de los
chakras tiene cierto número depétalos. Al observarlos de cerca se ve
que estos pétalos se asemejan a pequeños torbellinos giratorios que
ruedan a velocidades muy altas. Cada torbellino metaboliza una
vibración energética que resuena asu frecuencia específi ca de giro.
El chakra pélvico, por ejemplo, tiene cuatro torbellinos pequeños y
metaboliza cuatro frecuencias básicas de energía, y ot ro tanto
sucede con los restantes chakras. Los colores que se obsevan en cada
chakra guardan relación con la frecuencia de energía que se metabo-
liza a su velocidad determinada.
Como los chakras sirven para vitalizar el cuerpo, se encuentran
directamente relacionados con cualquierpatología de éste.
Figura 7-5
CHAKRAS MAYORES Y ÁREA DEL CUERPO QUE NUTREN
CHAKRA
NÚM.
DE
TORBELLINOS
PEQUEÑOS
GLÁNDULA
ENDOCRINA
ÁREA
DEL
CUERPO GOBERNADA
7-Corona
972
Violeta-blanco
Pineal
Cerebro
superior,
ojo derecho.
6-Cabeza
96
Índigo
Pituitaria
Cerebro
inferior,
ojo izquierdo,orejas,
nariz, sistemanervioso.
5-Garganta
16
Azul
Tiroides
Aparato
bronquial
y vocal,
pulmones,
canal alimentario.
4-Corazón
12
Verde
Timo
Corazón,
sangre,
nervio vago,
sistema circulatorio
3-Plexo
solar
10
Amarillo
Páncreas
Estómago,
hígado, vesícula
biliar,
sistema nervioso.
2-Sacro
6
Naranja
Gónadas
Sistema
reproductor.
1-Base
4
Rojo
Corticoadrenales
Espina
dorsal,
riñones.
La figura 7-5
muestra una relación de los siete chakras mayores situados a lo
largo de la espina dorsal,junto con el área del cuerpo que regula
cada uno. Cada chakra está relacionado con una glándulaendocrina y
un plexo nervioso mayor. Los chakras absorben la energía universal o
primaria (ch´i, orgón, prana, etc.), la fragmentan en sus partes
constitutivas y las envían a continuación a lo largo de unos ríos
llamados nadis, al sistema nervioso, a las glándulas endocrinas y
después a la sangre para nutrir el cuerpo, como se ve en la figura
7-6.
Figura 7-6: Paso metabólico de la energía primaria de entrada
El funcionamiento psicodinámico de los chakras, que comentaremos en
detalle, se refiere principalmente a los tres primeros cuerpos del
aura, los relacionados con las interacciones físicas, mentales y
emocionales en el plano terrestre. Por ejemplo, cuando el chakra del
corazón de un apersona funciona debidamente, ello significa que es
muy buena para el amor. Cuando el primer chakra funciona
saludablemente, la persona suele tener un fuerte deseo de vivir y se
siente muy conectada a la Tierra. Es una persona bien asentada en su
vida. Cuando los chakras sexto y tercero de alguien funcionan de
forma satisfactoria, su mente se muestra clara. Si no funcionan
bien, sus pensamientos son confusos.
El cuerpo etéreo (prime ra capa)
El cuerpo etéreo (de «éter», estado entre la energía y la materia)
está compuesto por diminutas líneas energéticas «en forma de trama
deslumbrante de haces luminosos» similares a las líneas de la
pantalla
de televisión (figura 7-7). Tiene idéntica estructura que el cuerpo
fí sico, incluyendo las partes
anatómicas y todos los órganos.
Consiste dicho cuerpo en una estructura definida de líneas de
fuerza, o matriz energética, sobre la que
se forma y sujeta la materia física del tejido corporal. Los tejidos
físicos existen como tales sólo gracias
al campo vi tal que los respalda; es decir, el campo es antecedente
y no resultado del cuerpo físico. Estaobservación ha sido
contrastada con las experiencias sobre el crecimiento de las plantas
que hemos llevado a cabo el doctor John Pierrakos y yo misma.
Mediante el uso de la elevada percepción sensorial, observamos que
la planta proyecta una matriz de campo energético en forma de hoja
antesde que ésta crezca; seguidamente, la hoja crece para llenar esa
forma ya existente.
La estructura en forma de trama del cuerpo etéreo está en constante
movimiento. El clarividente percibe, a lo largo de sus líneas
energéticas y por la totalidad del cuerpo físico denso, chispas de
luz blanca azulada en movimiento. El cuerpo etéreo se extiende desde
1,25 cm hasta 5 cm más allá del cuerpo físico y palpita a unos 15-20
ciclos por minuto.
El color del cuerpo etéreo varía de azul claro a gris. El primero ha
sido relacionado con una forma másfina que el segundo. Es decir, la
primera capa de una persona más sensitiva que tenga un cuerpo
sensitivo será azulada, mientras que una más atlética y robusta
tenderá a presentar un cuerpo etéreo más grisáceo. Todos los chakras
de esta capa tienen el mismo color que el cuerpo. Dicho de otro
modo,su coloración también irá del azul al gris. Los chakras parecen
torbellinos formados por una red luminosa, exactamente igual que el
res to del cuerpo etéreo. Se pueden percibir todos los órganos del
cuerpo físico, pero están formados con esta luz azulada
centelleante. Como en el sistema energético de
la hoja, esta estructura etérea establece la matriz para el
crecimiento de las células; es decir, las células del cuerpo crecen
a lo largo de las líneas de energía de la matriz etérea, que está
presente antes del crecimiento de las células. Si lográramos separar
el cuerpo etéreo y mirarlo aisladamente, nos pareceríaun ser humano
formado por líneas luminosas azules en constante centelleo.
Si el lector observa el hombro de alguna persona que esté iluminada
por una luz suave sobre un fondo blanco liso, negro liso o azul
oscuro, podrá ver las pulsaciones de este cuerpo etéreo. La
pulsación surge, por ejemplo, en el hombro, y recorre el brazo hacia
abajo como una onda. Si se mira con mayor atención, parece haber un
espacio en blanco entre el hombro y la neblina luminosa azulada;
hay, a continuación, una capa azul más brillante que se va
desvaneciendo lentamente conforme se aleja del cuerpo. Hay que tener
en cuenta, sin embargo, que desaparecerá inmediatamente después de
que la vea, ya que se mueve con mucha rapidez. Para cuando quiera
verla de nuevo, a fin de asegurarse, la pulsación se habrá ido brazo
abajo. Pruebe de nuevo. Conseguirá captar la siguiente.
El cuerpo emocional (segunda capa)
El segundo cuerpo aural (figura 7-8), o el siguiente más fino
después del cuerpo etéreo, se denomina generalmente cuerpo
emocional, y está asociado con los sentimientos. Sigue, más o menos,
el contorno del cuerpo físico. Su estructura es mucho más fluida que
la del etéreo y no duplica el cuerpo físico. Por
el contrario, parece estar formado por nubes coloreadas de una
sustancia fina en constante movimiento fluido. Se extiende desde 2,5
hasta 7,5 cm del cuerpo.
El cuerpo emocional penetra en los otros más densos a los que
envuelve. Su color varía desde matices transparentes brillantes
hasta tonos oscuros y turbios, lo que depende de la claridad o
confusión del sentimiento o la energía que los produce. Los
sentimientos claros y de gran energía, como el amor, la excitación,
la alegría o la ira son brillantes y transparentes; cuando los
sentimientos son confusos, resultan oscuros y turbios. A medida que
se energizan estos sentimientos mediante la interacción personal, la
psicoterapia corporal, etc., los colores se separan en sus matices
primarios y se abrillantan.
En el capítulo 9 nos ocuparemos de este proceso.
El cuerpo emocional contiene todos los colores del arco iris. Cada
Chakra parece un torbellino de distinto color, con una distribución
que presenta el mismo orden que el arco iris. La lista que sigue
muestra los chakras del cuerpo emocional y sus colores.
Chakra 1 = rojo
Chakra 2 = naranja rojizo
Chakra 3 = amarillo
Chakra 4 = verde hierba brillante
Chakra 5 = azul celeste
Chakra 6 = añil
Chakra 7 = blanco
En el capítulo 9 se ofrecen diversas observaciones sobre el cuerpo
emocional durante las sesiones terapéuticas. En líneas generales, el
cuerpo parece estar formado por manchas de color que se mueven
dentro de la matriz del campo etéreo y que se extiende un poco más
allá de éste. En ocasiones, una persona puede lanzar manchas
energéticas de color al aire que la rodea, algo que se puede
observar,
en especial, cuando la persona da rienda suelta a sus sentimientos
en una sesión terapéutica.
El cuerpo mental (tercera capa)
El tercer cuerpo aural es el cuerpo mental (figura 7-9), que se
extiende más allá del emocional y está compuesto por sustancias
todavía más finas, todas ellas relacionadas con los pensamientos y
losprocesos mentales. Aparece normalmente como una luz brillante que
irradia sobre la cabeza y los hombros y se extiende alrededor de
todo el cuerpo físico. Se expande y hace más brillante cuando la
persona que lo posee está concentrada en procesos mentales. Se
extiende desde 7,5 cm has ta 60 cm
del cuerpo.
El cuerpo mental también se halla estructurado. Contiene la
estructura de nuestras ideas. Se trata de un cuerpo de tonalidad
principalmente amarilla. Dentro de este campo se pueden ver formas
de pensamiento que aparecen como manchas de brillo y contornos
variables. Estas formas de pensamiento tienen colores adicionales
superpuestos que surgen, en realidad, del nivel emocional. El color
representa la emoción de la persona relacionada con la forma de
pensamiento. Cuanto más clara y definida sea la idea, más clara y
definida será la forma de pensamiento relacionada con dicha idea.
Me- joramos estas formas de pensamiento centrándonos en las ideas
que representan. Los pensamientos habituales se convierten en
fuerzas poderosas «definidas» que afectan a nuestras vidas.
Éste ha sido el cuerpo que más trabajo me ha costado observar. Ello
puede deberse, en parte, al hechode que los seres humanos apenas
estamos empezando a desarrollar nuestro cuerpo mental y a utilizar
nuestro intelecto de forma clara. Por esta razón, somos muy cons
cientes de la actividad mental y nos autoconsideramos una sociedad
analítica.
Más allá del mundo físico
En el sistema que yo empleo para curar (figura 7-4), las tres capas
aurales inferiores metabolizan las energías relacionadas con el
mundo físico, y las tres superiores metabolizan las energías que
guardan relación con el mundo espiritual. La cuarta capa, o nivel
astral, asociada con el chakra del corazón, esel crisol
transformador a través del cual debe pas ar la energía cuando va de
un mundo a otro. Es decir,la energía espiritual debe pasar por el
fuego del corazón para transformarse en energías físicas inferiores,
y las energías físicas (de las tres capas aurales inferiores) han de
atravesar el fuego trans for- mador del corazón para convertirse en
energías espirituales. En la curación de espectro total, que se
describe en el capítulo 22, utilizamos las energías asociadas con
todas las capas y todos los chakras y
las pasamos por el corazón, el centro del amor.
En la exposición realizada hasta aquí nos hemos centrado en las tres
capas inferiores. La mayor partede la psicoterapia corporal que
conozco sólo utiliza las tres capas inferiores y el corazón. Todo
cambia tan pronto como empezamos a examinar las cuat ro capas
superiores del campo aural, porque tan pronto como se abre la
percepción a las capas situadas por encima de la tercera, se inicia
también la percepción de personas o seres que existen en esas capas,
pero que no tienen cuerpos físicos. Según mis observaciones y las de
otros videntes, más allá de lo físico existen otras capas de
realidad, o
«bandas de frecuencias» de la realidad. Las cuatro capas superiores
del campo aural corresponden acuatro de esas capas de realidad. Debo
reiterar que la exposición que sigue es sólo un intento de
sistematización para explicar los fenómenos observados; estoy segura
de que en el futuro se crearán otros sistemas mejores desde todos
los puntos de vista. Hasta el momento, éste me resulta útil.
En la figura 7-4 he asociado en general los tres chakras superiores
con el funcionamiento físico,emocional y mental del ser humano en su
realidad espiritual. Ello se debe a que la mayoría de las personas
sólo usamos esa porción de nosotros mismos en ciertos tipos
limitados de funciones. Están la voluntad más alta, los sentimientos
de amor más elevados y el conocimiento más alto, en los que se
entienden de inmediato los conceptos completos. La cuarta capa está
asociada con el amor. Es la puerta por la que podemos penetrar en
otros estados de realidad.
Sin embargo, la imagen es realmente más complicada. Cada una de las
capas situadas por encima dela tercera es una capa completa de
realidad en la que se incluyen los seres, las formas y las funciones
personales que sobrepasan lo que normalmente llamamos humano. Cada
una es un mundo completo enel que vivimos y tenemos nuestro ser. La
mayoría de nosotros experimentamos estas realidades duranteel sueño,
pero no las recordamos. Algunos podemos entrar en estos estados de
realidad expandiendo nuestra conciencia mediante técnicas
meditativas. Éstas sirven para abrir los sellos existentes entre las
raíces de las capas de chakras y, con ello, franquear una puerta a
la conciencia que le permita viajar.
En la exposición que a cont inuación se realiza me centraré sólo en
la descripción de las capas aurales y sus limitadas funciones. Más
adelante, a lo largo del libro, abundaremos en las capas superiores
o «fre- cuencias de realidad».
El nivel astral (cuarta capa)
El cuerpo astral (figura 7-10) es amorfo y está compues to por nubes
de colores más bellas que las del cuerpo emocional. El cuerpo
astral, que se extiende desde aproximadamente 15 a 30 cm del cuerpo,
suele tener el mismo grupo de colores, pero por lo general éstos
aparecen teñidos con la luz rosada del amor. Los chakras presentan
la misma octava de colores que el arco iris del cuerpo emocional,
pero cada uno de ellos está infundido por la misma luz rosácea del
amor. El chakra del corazón de una persona que ama está invadido por
la luz rosa en el nivel astral.
Cuando las personas se enamoran, entre sus corazones se pueden
percibir bellos arcos de luz rosada,
y las palpitaciones doradas normales que observo en sus glándulas
pituitarias se tiñen de un hermoso color de rosa. Cuando las
personas formalizan sus relaciones producen lazos que salen de los
chakras que los conectan. Estos lazos existen en muchos niveles del
campo aural, además del astral. Cuanto más prolongadas y profundas
son las relaciones, más lazos existen y más fuertes son. Cuando las
relaciones se rompen, los lazos se desgarran, causando en ocasiones
un profundo dolor. El período enel que «supera» una relación suele
consistir en la desconexión de dichos lazos en los niveles más bajos
del campo para enraizarlos de nuevo dentro del yo.
Entre la gente se producen numerosas interacciones a nivel astral.
Grandes manchas de color de formas diversas atraviesan raudas la
habitación pasando entre las personas que se hallen en ella. Algunas
de estas manchas pueden ser agradables, otras no. Se puede sentir la
diferencia. Es posible que el lector se sienta incómodo por una
persona que se encuentra al otro lado de la habitación y que,
aparentemente, ni siquiera ha advertido su presencia; sin embargo,
la actividad es int ensa en cierto nivel. En alguna ocasión he visto
cómo un grupo de personas, de pie unas junto a otras, pretendían
ignorarse mutuamente, mientras que en el nivel energético existía
una comunicación total mediante grandes cantidades de formas
energéticas que se movían entre dichas personas. Sin duda el lector
ha tenido experiencias semejantes, sobre todo entre hombres y
mujeres. No se trata simplemente de expresión corporal; existe un
fenómeno energético real que puede percibirse. Por ejemplo, cuando
un hombre o una mujer, en un bar o una fiesta, imagina que hace el
amor con alguien, se produce una prueba real de los campos
energéticos para ver si están sincronizados y si las personas son
compatibles. En el capítulo 9 ofreceremos más ejemplos de este
fenómeno de interacción aural.
El cuerpo del patrón etéreo (quinta
capa)
A la quinta capa del aura la llamo patrón o plantilla etérea (figura
7-11) porque contiene todas las formas existentes en el plano físico
en forma de calco o plantilla, como el negati vo de una fotografía.
Es la forma de plantilla de la capa etérea, la cual, como se ha
dicho an tes, es la forma de plantilla del cuerpo físico. La capa
etérea del campo energético deriva su estructura de la capa de la
plantilla etérea. Constituye un calco o forma perfecta sobre la que
se superpone la capa etérea. Se ex tiende desde unos 45 cm hasta
unos 60 cm del cuerpo. En caso de enfermedad, cuando la capa etérea
se des figura, la actuación del patrón etéreo aporta el apoyo que
requiere la capa etérea en su forma original. Es el nivel en el cual
el sonido crea materia, en el que la curación mediante el sonido
resulta más efectiva. Nos ex tenderemos más sobre ello en el
capítulo 23, dedicado a la curación. Como clarividente, estas formas
se me aparecen com o líneas translúcidas o transparentes sobre un
fondo azul cobalto, muy semejantes al ciano tipo de un arquitecto,
con la única diferencia de que dichas líneas existen en otra
dimensión. Es como si se llenara por completo el espacio de fondo,
de manera que el espacio vacío creara la forma.
A título de ejemplo se podría comparar el medio por el que se crea
la esfera en la geometría euclidiana con la forma de crearla en el
espacio etéreo. En el primer caso, para crear una esfera se empieza
por definir un punto, y a continuación se traza un radio desde éste
a las tres dimensiones para crear la superficie de una esfera. Sin
embargo, en el espacio etéreo, lo que podríamos denominar espacio
negativo, la formación de una esfera tiene un proceso totalmente
opuesto. De todas direcciones llega un número infinito de planos que
llenan un espacio, excepto un área esférica que se deja vacía. Así
se define el espacio. Es el área que dejan de llenar los planos que
se encuentran mutuamente, definiendo,
por tanto, un espacio esférico vacío.
Así, el nivel de patrón etéreo del aura crea un espacio vacío o
negativo en el que puede existir el primer nivel, o nivel etéreo,
del aura. El patrón etéreo es el patrón del cuerpo etéreo que forma
la estructura dela cuadrícula (el campo energético estructurado)
sobre la que crece el cuerpo físico. De este modo, el nivel de
patrón etéreo del campo energético universal contiene todas las
formas y contornos que existenen el plano físico, excepto en el
nivel de patrón. Estas formas existen en el espacio negativo,
creando
un espacio vacío en el que crece la estructura de la cuadrícula
etérea y sobre el que existe toda manifestación física.
Al observar el campo de alguien, si nos centramos sólo en la
frecuencia vibratoria del quinto nivel úni cainente podemos aislar
la quinta capa del aura. Cuando realizo esta operación veo la forma
del campo aural de la persona, que se extiende hasta aproximadamente
75 cm del individuo. Tiene el aspecto de una forma oval estrecha.
Contiene la estructura compl eta del campo, in cluyendo los chakras,
los órganos corporales y la for ma del cuerpo (extremidades, etc.),
todo ello en forma negativa. Estas estructuras parecen formadas por
líneas transparentes sobre un fondo azul oscuro, el espacio sólido.
Cuando sint onizo en este nivel también puedo percibir las demás
formas de mi entorno. Todo ello parece
suceder de forma automática cuando realizo la conmu tación de mi
mecanismo perceptor a esta gama. Es de cir, mi atención es atraída,
en primer lugar, al quinto ni vel general, para centrarse a
continuaciónen la persona determinada a la que esté observando.
El cuerpo celestial (sexta capa)
El sexto nivel es el nivel emocional del plano espiritual, llamado
cuerpo celestial (figura 7-12). Se extiende des de unos 60 hasta
unos 83 cm del cuerpo. Es el nivel a través del cual experimentamos
el éxtasis espiritual. Podemos alcanzarlo por la meditación y
mediante otras muchas formas de trabajo
de transformación que he mencionado en este libro. Cuando alcanzamos
el punto del «ser» dondeconocemos nuestra conexión con todo el
universo, cuando vemos luz y amor en todo lo exis tente, cuando nos
encontramos sumergidos en luz per cibiendo que formamos parte de
ella y que ella forma parte de nosotros y sentimos que somos uno con
Dios, entonces hemos elevado nuestra conciencia hasta el sex to
nivel del aura.
El amor incondicional fluye cuando existe una conexión entre el
chakra del corazón y el chakra celestial, ambos abiertos. En esta
conexión combinamos el amor de la humanidad, nuestro amor humano
básico en la carne por nuestros congéneres, con el éxtasis
espiritual que se encuentra en el amor espiritual que va más allá de
la realidad física hasta todos los reinos de la existen cia. La
combinación de ambos crea la experiencia de l amor incondicional.
El cuerpo celestial se me aparece bañado en una her mosa luz
tornasolada compuesta principalmente por tonalidades pastel. Esta
luz tiene un brillo de oro -plata y una calidad opalescente, como
lentejuelas de madreper la. Su forma es m enos definida que la del
nivel del patrón etéreo, por cuanto que parece estar compuesta sim
plemente por luz que irradia del cuerpo, como el brillo que rodea
una vela encendida. Dentro de este brillo hay, además, rayos de luz
más fuertes y brillantes.
El patrón cetérico o cuerpo causal
(séptima capa)
La séptima capa es el nivel mental del plano espiritual denominado
patrón o plantilla cetérica (figura 7-13). Se extiende desde
aproximadamente 75 hasta unos 105 cm del cuerpo. Cuando llevamos
nuestra concie ncia al sép timo nivel del aura sabemos que somos uno
con el Crea dor. La forma exterior es el ovoide del cuerpo del aura
y contiene todos los cuerpos aurales asociados con la encarnación
por la que esté pasando un individuo. También este cuerpo es un
patrón altamente estructurado. Yo lo veo compuesto por diminutos
hilos de luz oro -plata que mantienen unida la forma completa del
aura. Contiene una estructura en rejilla dorada forma da por el
cuerpo físico y todos los chakras.
Cuando «sintonizo» con el nive l de frecuencia de la séptima capa
percibo una hermosa luz dorada temblo rosa, cuyas palpitaciones son
tan rápidas que la he de nominado «luz trémula». Se asemeja a un
conjunto de millares de hilos dorados. La forma ovoide dorada se
extiende desde el cuerp o entre90 y 105 cm, según cada persona, con
el extremo menor por debajo de los pies y el mayor sobresaliendo
unos 90 cm por encima de la cabeza. Todavía se puede expandir en
mayor medida si la persona es muy enérgica. Tal como yo lo veo, el
bor de exterio r tiene, realmente, el aspecto de una cáscara de
huevo, con un espesor de 60 a 125 mm. Esta parte exterior de la
séptima capa, muy fuerte
y elástica, re siste a la penetración y protege el campo en la misma
forma que el cascarón lo hace conel polluelo. En este nivel, todas
las formas de los chakras y el cuerpo me parecen hechas de luz
dorada. Es el nivel más fuerte y elástico del campo aural.
Se podría comparar con una onda luminosa erguida y de intrincadas
formas, que vibra a una velocidadex tremadamente elevada. Al
mirarla, casi se puede oír un sonido, y tengo la seguridad de que es
posible escuchar lo si meditamos sobre tal imagen. El nivel de
patrón do rado también contiene la corriente de fuerza principal que
recorre arriba y abajo la espina dorsal, i gual que la corriente de
fuerza principal que nutre todo el cuerpo. Al palpitar hacia arriba
y abajo por la espina dorsal, esta corriente de fuerza dorada
arrastra tras de sí la energía a ti avés de las raíces de cada uno
de los chakra y conecta las energí as que se toman atravesándolos y
en lazándolos.
La principal corriente vertical induce otras corrientes en ángulo
recto respecto de la primera para formar serpentinas doradas que se
extienden directamente al ex terior del cuerpo. Éstas, a su vez,
inducen a otras que rodean el campo, de manera que todo el campo
aural y todos los niveles situados por debajo se hallan rodeados y
sostenidos dentro de esta red, semejante a una ces ta. La red
muestrael poder de la luz dorada, la mente divina que mantiene unido
el campo en su totalidad e integridad.
Además; en el nivel del patrón cetérico también están las bandas de
la vida anterior dentro del casca- rón. Se trata de franjas de luz
coloreada que rodean completamente el aura y que se pueden encontrar
en cualquier lugar de su superficie. La banda que se halla cerca del
área de la cabeza- cuello suele ser la que contiene la vida pasada
que tratamos de aclarar en nuestras pre sentes circunstancias
vitales. Jack Schwarz ha descrito estas bandas y la forma de conocer
su significado por
su color. Más adelante, en la sección referida a la curación de la
vida anterior, describiré el
funcionamiento de estas bandas. El nivel cetérico es el último nivel
au ral en el plano espiritual. Contiene el plan de vida y es el
último ni vel directamente relacionado con esta encar nación. Más
alláde éste se encuentra el plano cósmico, que no se puede
experimentar desde el punto de vista de unasola encarnación, llena
de todo tipo de condicio namientos.
El plano cósmico
Llegados a este pu nto, los dos niveles que puedo observar por
encima del séptimo son el octavo y el noveno. Ambos están asociados
con los chakras octavo y noveno, situados por encima de la cabeza.
Cada nivel parece ser cristalino y estar compuesto por vibraciones
muy altas y finas. Los niveles octavo y noveno parecen seguir una
pauta general altamente entre la sustancia (octavo nivel) y la forma
(noveno) por cuanto que el octavo se parece a una sustancia fluida,
mientras que el noveno presenta el aspecto de una plantilla
cristalina de todo lo que tiene debajo. No he encontrado referencia
alguna sobre estos niveles en los textos referidos al tema, aunque
puede que la haya. Sé muy poco sobre ellos, excepto por lo que se
refiere a algunas prácticas curativas muy poderosas quem e enseñaron
mis guías. Expondré tales métodos en el capítulo 22.
Percepción del campo
Es importante que el lector recuerde que al abrir su visión
clarividente sólo percibirá, seguramente, las prime ras capas del
aura. Es probable que tampoco sea capaz d e distinguir entre capas.
Quizá sólo vea colores y formas. A medida que progrese, se irá
sensibilizando ha cia frecuencias cada vez más altas, de manera que
pue da percibir los cuerpos superiores. También será capaz de
distinguir las capas y de centranse en aquélla que elija.
La mayoría de las ilustraciones de los capítulos que siguen sólo
muestran los tres o cuatro cuerpos aurales inferiores. No se hace
distinción entre las capas, que pa recen estar mezcladas entre sí y
actuar juntas en la ma yoría de las interacciones descritas. Durante
la mayor parte del tiempo, nuestras emociones inferiores y nues tros
procesos mentales básicos y sentimientos interpersonalesse
encuentran mezclados y confusos. No tene mos mucha habilidad para
distinguirlos en nosotros mismos. Parte de esa mezcla se muestra
incluso en el aura. Muchas veces, los cuerpos mental y emocional pa
recen actuar como una forma confusa. En las descrip ciones que vamos
a ver sobre los procesos terapéuticos no se establece una gran
distinción en los cuerpos. Sin embargo, mediante el proceso
terapéutico o cualquier otro de crecimiento, las capas del propio
ser se hacen más evidentes.
La persona observada aumenta su capacidad de distinguir entre las
emociones básicas, los pro cesosmentales y las emoc iones más
elevadas del amor incondicional relacionadas con los niveles aurales
más elevados. Esta distinción se produce por medio del pro ceso de
comprensión de las relaciones causa-efecto des critas en el capítulo
15. Es decir, el cliente empieza a en ten der la forma en que su
sistema de creencias afecta a las ideas en el cuerpo mental y como
éste afecta a su vez a las emociones, luego al cuerpo etéreo y,
finalmen te, al físico. Esta comprensión permite distinguir a con-
tinuación las capas del campo aural. Estas capas se ha cen realmente
más claras y definidas, y también
se aclara el cliente al adquirir una mayor autocomprensión de los
sentimientos físicos, los emocionales ylos pensamientos, actuando en
consecuencia.
Más adelante, en las secciones sobre curación, será muy importante
distinguir las capas del aura.
Respuestas a las preguntas sobre los
ejercicios para visualizar el aura humana
La energía se desplaza casi siempre de izquierda a derecha alrededor
del círculo. Es reacia a detenersey, por lo general, es imposible
detener el flujo total. La sensación de crear algo entre las manos
produceun cosquilleo acompañado de presión, algo así como la energía
estática. Cuando los bordes energéticos corporales se tocan, la
sensación es de hormigueo y presión. Cuando los bordes energéticos
corporales tocan la piel hay una sensación de cosquilleo acompañado
de presión sobre la superficie cutánea. Si traza círculos sobre la
palma de la mano, puede sentir el cosquilleo por la línea el
círculo.
La mayoría de las personas ven una neblina alrededor de los dedos y
las manos cuando tratan dedetectar el aura. Parece algo así como la
onda térmica sobre un radiador. En ocasiones se ve en varios
colores, por ejemplo en azul. Al principio suele verse incolora. Los
cuerpos energéticos se estiran como caramelo entre los dedos cuando
la neblina de los de una mano conecta con la de los dedos de la mano
contraria. Al desplazar las manos de forma que los dedos enfrentados
sean distintos, la neblina de cada dedo seguirá inicialmente a la
del anterior dedo enfrentado para saltar a continuación a la punta
del más cercano estableciendo un cambio en el flujo (figura 7-14).
Revisión del capítulo 7
1. ¿Qué relación existe entre el campo energético uni versal y el
campo energético humano?
2. ¿Qué aspecto tiene el cuerpo etéreo? ¿En qué se di ferencia del
emocional?
3. ¿Cuáles son las tres funciones de los chakras?
4. ¿Por qué presenta un chakra un color determinado?
5. ¿Dónde está el núcleo del chakra?
6. ¿Con qué estructuras anatómicas están relacionados los chakras?
7. Describa las siete capas más bajas del campo aural y sus
funciones.
8.
Describa las relaciones entre los chakras y las capas del
aura.
9. ¿Dónde se encuentran situados los chakras octavo y
noveno?
10. Describa un chakra en la séptima capa del campo.
11. ¿Dónde se encuentra situada la corriente de fuerza
vertical principal?
12. ¿Qué capa mantiene unidos los CEH?
13. ¿En qué capa del CEH aparecen las emociones?