SESIÓN DEL 11/11/03
Médium:
Jorge Olguín.
Interlocutor:
Horacio Velmont.
Entidad que
se presentó a dialogar:
Eón, el Absoluto.
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Interlocutor:
¿Es usted, Eón?
Eón: Aquí
estoy…
Interlocutor: ¿Cómo le va, tanto tiempo?... Obviamente
estoy bromeando… Hablando en serio, ¿podríamos hacer una especie de ping
pong como acostumbramos hacer con el Maestro Ron Hubbard? Lo pregunto por
la cantidad de preguntas que tengo agendadas…
Eón:
Puedes hacer las preguntas.
Interlocutor: La primera pregunta que quiero hacerle es
sobre el origen del hombre en la Tierra. Es un tema sobre el cual tengo
bastante confusión. Lo que sé es que los elohim crean los espíritus, entre
ellos los espíritus humanos… y entonces los espíritus humanos esperan que
los organismos físico evolucionen desde los virus…
Eón: No
evolucionan desde los virus sino desde las bacterias. Además, los elohim
no crean espíritus “humanos” o “animales” o “vegetales”, sino espíritus
conceptuales, que pueden encarnar tanto en un humano como en un reptiloide
como en una planta, siempre y cuando la raza tenga el tipo de
decodificador apropiado, es decir que esté en relación con el nivel
conceptual o de discernimiento de ese espíritu.
Esto
significa que nunca va a encarnar un espíritu conceptual elevado, es
decir, con discernimiento superior, en una entidad animal, como por
ejemplo en un perro terrestre, porque no podría encajar, ya que necesita
un decodificador más sofisticado para poder expresar sus ideas.
Quiero ir
de adelante hacia atrás. ¿Qué sucedería entonces −me adelanto a lo que van
a preguntar el día del mañana− si el espíritu conceptual precisa un
decodificador de un homo sapiens sapiens −estamos hablando de la
Tierra− y encarna en un pitecántropos?
Interlocutor:
Obviamente se
encontraría obstaculizado para desarrollar sus pensamientos.
Eón:
Correcto. Y sin embargo, a pesar de ello los espíritus conceptuales
elevados igualmente encarnaron en esas entidades primitivas.
Interlocutor:
¿Por qué hicieron algo así tan irracional, por lo menos en apariencia?
Eón:
Porque el decodificador en esas entidades primitivas estaba
desarrollándose muy lentamente y los espíritus decidieron encarnar para
acelerar la evolución de dicho codificador y de ese modo ir generando, a
nivel genético, la mente analítica.
Interlocutor:
¿Hubo algún tipo de presión, no sé cómo expresar esto, para que encarnaran
en esas entidades tan primitivas?
Eón: No,
en absoluto, y esto es un mérito de ellos, porque nadie los obligaba a
encarnar.
En esa
época, la evolución de los australopitecos y de otras razas homínidas era
muy lenta, casi nula, porque eran razas que no vivían más de veinticinco o
treinta años físicos, y solamente se dedicaban a comer, a procrear y a
pelearse entre ellos.
Interlocutor: En
concreto, entonces, gracias a los espíritus la evolución se aceleró.
Eón: Así
es. Los espíritus se prestaban a encarnar voluntariamente a fin de que
mediante sucesivas encarnaciones la raza evolucionara.
Interlocutor: ¿En alguna canalización con otros médium
se habló de esto?
Eón: No,
en ninguna canalización de la Tierra se habló de esto. Es una primicia
absoluta. Aun los mismos espíritus del Error de los planos 2 y 3
encarnaban por el goce de aparearse con la hembra, y de esta forma, aunque
indirectamente, prestaban servicio a la raza.
Interlocutor:
¿Se puede decir, por lo tanto, que a medida
que iban pasando
las sucesivas generaciones el hombre iba evolucionando y su decodificador
mental se hacía más sofisticado?
Eón: Así
es… Hubo, por ejemplo, una raza que duró cuarenta mil años. Bueno,
comparándola a cómo era al comienzo de esos cuarenta mil años y cómo era
al final, la raza había avanzado enormemente, a tal punto que ya no era la
misma, pues había evolucionado genéticamente.
Interlocutor: Hay algo que me quedó pendiente… ¿Es un
concepto erróneo preguntar cuál fue el primer organismo en que encarnó un
espíritu conceptual elevado?
Eón: No,
no es un concepto erróneo. Yo dije que iba a ir de adelante para atrás,
justamente para explicar qué sucedía con un espíritu complejo, con su
mente conceptual intacta, en un decodificador de 800 cm3, que
no tenía ni la décima parte de pensamiento abstracto de la que tiene el
homo sapiens sapiens en la actualidad.
Interlocutor:
Supongo que el espíritu se sentiría como aprisionado, como que no
encajaba…
Eón: Así
es. Imagínate que tú estuvieras encarnado en un simio de los de hoy…
Interlocutor:
Puedo imaginarlo…
Eón:
Bien. Pero aun así esos espíritus encarnaban, pues, como ya señalé, lo
hacían con la misión de ayudar a la raza a evolucionar.
Los
espíritus conceptuales complejos que encarnaban en esa época sabían que
esa raza primitiva el día del mañana iba a ser humana total y entonces
podrían desarrollar en el plano físico un pensamiento conceptual también
elevado.
Interlocutor:
Esto está claro, pero hay algo que sigo sin comprender… ¿Los elohim crean
solamente espíritus conceptuales?
Eón: Los
elohim crean espíritus conceptuales y espíritus no conceptuales, es decir,
espíritus más básicos, como los animales actuales.
Interlocutor:
¿Todos los espíritus de cualquier naturaleza, entonces, fueron creados por
los elohim?
Eón: Así
es. Todos los espíritus fueron creados por los elohim.
Interlocutor: Recapitulo para ver si entendí bien todo
lo expuesto hasta ahora… Los elohim crean espíritus humanos…
Eón: Los
elohim no crean espíritus “humanos” sino espíritus conceptuales. No crean
espíritus “humanos” porque esta denominación no cabe, ya que hoy tú puedes
encarnar en un organismo humano y mañana desencarnas y puedes encarnar en
un reptiloide.
En este
caso, no eres un espíritu “humano” que encarna en un reptiloide, sino un
espíritu conceptual que encarna en un organismo reptiloide. Y también
puedes encarnar en cualquier otro organismo animal o vegetal. Nada lo va a
impedir, pero siempre y cuando tales animales o tales vegetales tengan un
decodificador igual que el humano.
Incluso
puedes encarnar en un organismo humanoide, como lo hizo por ejemplo este
filósofo que tú siempre nombras, Rah, del planeta Antares 4, que mide
menos que las mujeres del planeta Tierra, pesa menos de 40 kilos
terrestres, es menudito, su ADN no es igual al ADN de aquí…
Interlocutor:
¿Un Langar podría desencarnar como langosta y encarnar en un organismo
terrestre?
Eón: Sí,
porque el decodificador mental es similar.
Interlocutor: Esto quedó claro, pero me queda la
intriga respecto a por qué razón un espíritu conceptual elevado encarnaría
en un reptiloide o en un anfibio? Se supone que el espíritu conceptual
elevado elegiría para encarnar el organismo más elevado y no uno menos
elevado.
Eón:
Vamos al revés, porque yo siempre pregunto al revés para hacerte pensar,
como hacía con la mayéutica un filósofo de ustedes llamado Sócrates… ¿Por
qué hay distintas razas en el universo? Hay distintas razas en el universo
porque en cada planeta hay una condición de vida distinta.
Y a veces
esa condición de vida distinta resulta ser más favorable como para que una
vida anfibia crezca en inteligencia y su decodificador vaya floreciendo.
Hay
planetas donde no han florecido las razas humanoides o animales y sí lo
hicieron las razas vegetales, que al principio eran inmóviles y luego
empezaron a salirse de su raíz y a través de los milenios adquirieron
movilidad propia y pensamientos abstractos.
Hay
planetas donde la raza vegetal es pensante al punto de que su
decodificador es similar al del humano.
Esto
significa que no existe menoscabo alguno en que un espíritu conceptual
elevado encarne en este tipo de organismo, ya que puede evolucionar lo
mismo que en un organismo humano.
Interlocutor: Entendí perfectamente el punto… Desde ya
que las plantas de nuestro planeta no sirven para que un espíritu
conceptual elevado encarne, ¿pero qué tipo de decodificador tienen?
Eón: La
raza vegetal de este planeta tiene un decodificador celular. Fíjate que si
cortas una rama con una tijera, y te retiras y vuelves al día siguiente
con esa tijera y un aparatito para medir la reacción, verías que al
ponerlo en la rama la aguja marca miedo. Y la planta, aunque no tiene un
decodificador desarrollado como el de los humanos o el de los animales de
este planeta, sin embargo presiente porque tiene un decodificador celular
que, aunque es muy básico, existe.
Interlocutor: Sí, he leído sobre ese experimento.
Eón:
Continúo con lo que estaba explicando… En las distintas razas del universo
hay seres pensantes de todas las especies, y así se pueden encontrar no
sólo humanoides pensantes sino también simios pensantes, plantas
pensantes, incluso hasta minerales pensantes.
Interlocutor:
¿Minerales pensantes?
Eón: Así
es… Hay planetas donde los seres son de silicio y también de selenio, no
de carbono como en la Tierra. Si tú los palparas tendrías la sensación de
tocar una piedra. Apenas pueden moverse. Se manejan de otra manera. Apenas
tienen voz, ya que emiten un sonido gutural. Se comunican por señales. Sin
embargo pueden albergar en su organismo, por así llamarlo, un espíritu
conceptual…
Interlocutor: ¿Estamos hablando siempre de un 10 % de
espíritu conceptual?
Eón: Así
es. Siempre encarna un 10 % de espíritu nada más.
Interlocutor: Hasta aquí está todo claro… Ahora bien,
si yo estoy en el mundo espiritual, ¿puedo distinguir a cada espíritu
conceptual como para decir, por ejemplo, “éste es el espíritu de un tigre,
éste otro es el espíritu de un reptil, aquél de más allá es el espíritu de
una planta”?
Eón: No,
no los distinguirías, porque los espíritus conceptuales no son humanos ni
humanoides ni animales ni vegetales, sino lisa y llanamente espíritus
conceptuales. La diferenciación es en el plano físico únicamente
Interlocutor: Entiendo… Ahora quisiera despejar una
curiosidad, ¿sobre qué podría conversar yo, al desencarnar cómo humano,
con otro espíritu que haya desencarnado de una planta?
Eón: Si
tú al desencarnar te enfrentaras con un espíritu que recién desencarnó de
un vegetal, simplemente intercambiarían experiencias. En realidad es muy
sencillo de comprender. Ese espíritu que encarnó como planta te
preguntaría: “¿Que sentiste tú, estando encarnado como humano, al tener un
orgasmo?”. Y tú, a su vez, le preguntarías: “¿Qué sentiste cuando a la
planta hembra −ten en cuenta que al tener movilidad hay plantas machos y
plantas hembras− le esparciste todo el polen por su cuerpo con caricias?”.
Interlocutor:
Sería en verdad una experiencia muy interesante… ¿Cómo hacen el amor los
vegetales?
Eón:
Cuando las plantas tienen movilidad, y esto es una primicia, el amor lo
hacen de esta manera: Se empiezan a acariciar, se abrazan, sienten como
una especie de orgasmo en todas sus hojas y el macho va esparciendo el
polen por el cuerpo de la hembra, hasta que la hembra después despide sus
semillas para que crezcan nuevas plantas.
Esas
plantas quedan enterradas en la tierra hasta que nace la nueva planta de
la semilla y entonces ya empieza su movilidad.
Para que
te des una idea, es como el huevo de serpiente o de tortuga que está
enterrado en la arena hasta que el reptil o el quelonio rompen el huevo y
entonces salen y caminan.
Interlocutor:
Está claro… ¿Incluso podría haber intercambio de roles?
Eón: Sí,
por supuesto. Tú podrías encarnar como planta y el otro espíritu
conceptual podría encarnar como humano.
Quiero
aclarar que si tú vas a otro mundo y encarnas como planta, no va a ser una
planta como las terrestres, sino una planta de un mundo donde los
vegetales tengan expresión e incluso escriban poesía.
Interlocutor: Ahora bien, supongamos que yo desencarno
y también desencarna un espíritu que encarnó en una gallina. Digo gallina
por mencionar un tipo de animal con “pocas luces”. ¿Podríamos comunicarnos
e intercambiar experiencias?
Eón: No,
porque no se trata de espíritus conceptualmente iguales.
Interlocutor: ¿Pero nos podríamos entender de alguna
forma?
Eón: Tú
quizás entenderías al espíritu que encarnó en una gallina, pero éste a ti
no, porque su espíritu conceptual es muy básico, muy elemental.
Interlocutor: ¿Yo podría encarnar en una gallina
terrestre?
Eón: No,
en una gallina terrestre no, porque su decodificador mental es muy
limitado. Sería como si estuvieras encerrado sin poder comunicarte.
Interlocutor: ¿Yo, estando en el mundo espiritual,
podría decir, por ejemplo; “Éste es un espíritu de Luz, éste es un
espíritu del Error, éste es un espíritu apto para encarnar en una gallina,
este otro es un espíritu apto para encarnar en una ameba?. Concretamente,
¿puedo distinguir a los espíritus de esta forma?
Eón: Sí,
puedes distinguirlos así.
Interlocutor:
¡Entonces hay una clasificación!
Eón: Hay
una clasificación espiritual para lo que ustedes en el plano terrenal
llamarían “animales inferiores”, mal llamados así.
Interlocutor: A ver si entendí: Los elohim crean
distintos espíritus conceptuales, desde aquellos que pueden encarnar en
humanos o humanoides hasta aquellos que pueden encarnar en un virus o en
una ameba… ¿Es así?
Eón: Es
así.
Interlocutor:
Ahora veo que usted lo explicó bien pero yo lo entendí mal…
Eón:
Cuando yo digo que tu espíritu puede encarnar en distintas razas estamos
hablando de razas pensantes.
Interlocutor: Eso lo tengo claro… Pero creo haber
preguntado en algún momento si había divisiones en los espíritus
conceptuales y usted me dijo que no…
Eón:
Cuando yo te he dicho que no hay divisiones lo he hecho en función de que
todos los espíritus conceptuales pueden encarnar en todas las razas
pensantes del universo, sean humanos, sean humanoides, sean animales,
sean vegetales, sean minerales. Pero siempre que tengan un decodificador
mental apropiado al concepto o discernimiento del espíritu encarnante.
A su vez,
hay otros espíritus conceptuales menos elevados que van a encarnar en
especies animales que tengan un decodificador más reducido acorde con
ellos.
Y ahora
te voy a dar una primicia… ¿Sabes quiénes son los encargados de mantener
el equilibrio y que saben en qué planeta debe encarnar cada espíritu?
Interlocutor: No
me lo imagino…
Eón: Los
Lípikas…
Interlocutor: Yo
tenía entendido que el espíritu tenía libre albedrío para elegir su
encarnación…
Eón: Los
espíritus conceptuales elevados sí pueden elegir dónde, cuándo y en qué
familia encarnar, e incluso también pueden elegir pasar por determinados
problemas para evolucionar, siempre con el riesgo de involucionar si
fracasan. Pero el espíritu conceptual de una gallina −y menciono este
animal porque tú lo trajiste a colación− no puede elegir dónde encarnar
porque su concepto es muy elemental. Entonces son los Lípikas los que
envían al 10 % de ese espíritu a encarnar, por ejemplo en el organismo de
una gallina.
Interlocutor: Ahora entendí… ¿En los animales
encarnados hay comunicación entre el Yo superior y el Yo inferior?
Eón: ¡Por
supuesto que sí! Fíjate por ejemplo que un caballo está caminando por un
sendero, sea con un jinete o arrastrando un carro, y ocurre que el sendero
se corta porque hay un precipicio y a consecuencia de ello el animal
sorpresivamente se pone nervioso, incluso aunque falten muchos metros para
llegar a ese lugar… ¿Cómo sabe el caballo que hay peligro? ¡Porque su 90 %
se lo está dictando!
¿Cómo
nadie, en el planeta Tierra, habiendo siete mil millones de seres humanos
encarnados lo ha pensado?
El Yo
Superior del caballo, aun siendo un concepto limitado, le está diciendo a
su 10 %: “¡Cuidado que hay un precipicio!”. Y el caballo justo se detiene
en el borde y salva al jinete o al conductor del carro. ¡Y se lo atribuyen
al instinto!
Interlocutor:
Estos hechos los he leído muchas veces, pero nunca explicado así… Continúo
con el razonamiento para ver si entendí… Los elohim crean espíritus
conceptuales de distinto tipo.
Eón:
Correcto.
Interlocutor: ¿Y también crean espíritus “no
conceptuales”? Lo pregunto porque quiero aclarar bien el significado de la
expresión “no conceptuales”.
Eón:
Todos los espíritus son conceptuales en alguna medida, pero la expresión
“no conceptuales” está reservada para los espíritus conceptuales con
capacidad de concepto muy pequeña..
Interlocutor:
Ahora capté la idea definitivamente. Tenía un obvio malentendido. El
espíritu conceptual de un virus sería entonces más bien un espíritu “no
conceptual”…
Eón:
Correcto. Obviamente, el concepto que tiene un virus es tan pequeño que es
casi inexistente, por eso hablo de espíritu no conceptual. Un virus es
casi puro instinto.
Interlocutor: Está perfectamente claro… Ahora paso a
otra pregunta… ¿Cuál sería el primer organismo humano en el que encarnó un
espíritu conceptual?
Eón: El
primer organismo humano fue una raza que existió hace millones de años en
el centro del continente que ustedes llaman África. Era un animal
cuadrúpedo, apenas un poquito más conceptual que el mono actual.
Interlocutor: ¿Esa raza está registrada en nuestros
libros de antropología?
Eón: No,
no está registrada. Era muy anterior al Australopitecos.
Interlocutor: ¿Y cómo la podríamos llamar?
Eón: Se
la podría llamar Áfricapitecos.
Interlocutor: Voy a agendar el término... Para concluir
este tema, ¿por qué no podríamos llamar a los espíritus aptos para
encarnar en organismos humanos “espíritus conceptuales humanos”, para
diferenciarlos, por ejemplo, de los espíritus conceptuales aptos para
encarnar en organismos animales o vegetales?
Eón: No
habría ningún inconveniente en utilizar la expresión, pero siempre que la
referencia sea al planeta Tierra. Tú eres un espíritu conceptual humano
porque has encarnado en un organismo humano, pero si mañana decides
encarnar en otro planeta como planta en una misión importantísima,
entonces ya no eres un espíritu conceptual humano…
Interlocutor: Tiene razón, era algo obvio… ¿Habría
entonces alguna forma de llamarlo?
Eón:
Puedes llamarlo “espíritu conceptual superior”, aunque a muchos Maestros
de Luz la palabra “superior” les pueda parecer egoica.
Interlocutor: Pienso que el término “superior” puede
utilizarse, pero siempre aclarando, para que no haya ninguna mala
interpretación, en qué sentido se lo está utilizando… ¿Estaría concluida
esta cuestión del origen del hombre en la Tierra?
Eón: Sí,
con los nuevos conceptos que he dado. Y haciendo una chanza, porque yo
también hago chanzas, ya que la broma, como el amor, forman parte de la
Creación como la estrella y la piedra, te diría que “son conceptos que
sólo Dios podría haberte dado”.
Interlocutor: Espero no cometer una blasfemia diciendo
que al fin y al cabo Dios es humano… Y por las dudas, antes que me
responda, escapo por la tangente y le pregunto si se puede establecer una
cantidad de clasificaciones entre los espíritus conceptuales superiores y
los espíritus conceptuales inferiores… Por ejemplo diez, veinte, cien
clasificaciones…
Eón: ¡Un
millón, como mínimo!
Interlocutor: Bueno, creo que el tema está aclarado.
Paso a otra pregunta que creo que es interesante en grado sumo... ¿En
nuestro planeta se dio alguna vez que se haya cambiado la historia y nos
despertamos con una historia diferente sin saberlo? Por ejemplo, que
Kennedy no haya sido asesinado… Esta pregunta tiene relación con los
viajeros del tiempo, porque ellos viajan para reparar hechos alterados de
la historia. Ya sabemos que no hay necesidad de repararlos, pero, bueno,
los viajeros del tiempo parece que creen que sí, que hay que reparar las
alteraciones. La pregunta concreta es ¿cómo puede desarreglarse lo que ya
aconteció, si lo que ya acontenció es inamovible? ¿Quién desarregla los
hechos acontecidos?¿Únicamente los viajeros del tiempo?
Eón:
Muchas veces se ha cambiado la historia en este planeta y el planeta ha
involucionado.
Interlocutor: La pregunta concreta es cuál fue ese
hecho y quién lo modificó.
Eón: El
viajero del tiempo que modifica algo prácticamente crea un universo
alterno nuevo y ese universo alterno nuevo puede transformarse en el
original.
Interlocutor: ¿Y el universo alterno anterior?
Eón:
Simplemente se seca como una raíz que no tiene agua.
Interlocutor: ¿Únicamente los viajeros del tiempo
pueden alterar los hechos ya sucedidos?
Eón: Los
viajeros del tiempo y también las decisiones.
Interlocutor: ¿Podría darme algún ejemplo concreto?
Eón: Tu
conoces la memoria reencarnativa, pero hay otra memoria, que es la llamada
memoria temporal.
Interlocutor: ¿Cuál es la memoria temporal?
Eón: Tú
habrás escuchado, o lo habrás leído en algún libro de historia, que
Carlomagno conquistó muchos territorios. Pues bien, si un viajero del
tiempo mata a Carlomagno a los cinco años, esa historia de Carlomagno como
conquistador no ha ocurrido. Y lo mismo podría suceder con Alejandro el
Grande, si lo matan de joven, en cuyo caso la historia de Alejandro
conquistador no ha sucedido… En estos casos, tú no vas a saber nunca ni de
uno ni de otro conquistador. Pero tu memoria temporal tiene como una
especie de resabio de eso.
Interlocutor: Esto está claro, pero es una historia
hipotética… ¿Hay alguna historia real que podamos conocer?
Eón: Una
historia real es la de Jesús, que se salvó de la crucifixión.
Interlocutor: ¿Ésa sería la verdadera historia?
Eón: No
se puede hablar de la verdadera historia. La verdadera historia es siempre
la actual, la que tú estás viviendo. Lo que ocurre es que yo estoy por
encima de todas las alternativas.
Interlocutor: ¿Cómo fue entonces esa historia de Jesús
en la que no fue crucificado?
Eón: Esa
historia continuó en que no hizo ninguna misión en otro planeta, no fue
resucitado por extraterrestres, tuvo una vida normal, volvió a buscar a
Miriam, la samaritana del Pozo de Jacob, que estaba sola porque una peste
había asolado a toda su familia, muriendo también su esposo y sus
hijos…Por este motivo ella se fue con él, ya que de lo contrario nunca los
hubiera abandonado…
Interlocutor: ¿Estamos hablando de un universo
alternativo?
Eón: Así
es… Estoy hablando de la samaritana del relato del eloah Arbillac…
Interlocutor: Sí, lo tengo presente.
Eón:
Jesús y la samaritana se van a vivir en Cachemira, tienen hijos y él muere
en este lugar…
Interlocutor: Hay justamente un libro llamado “Jesús
murió en Cachemira”…
Eón:
Exacto. Ese libro fue escrito con memoria temporal.
Interlocutor: ¡Notable!
Eón: Pero
el libro está incompleto porque no habla de la samaritana, ni del
encuentro de Jesús con ella en el Pozo de Jacob ni nada de esas cosas.
Interlocutor: ¿Pero la historia original es la que
nosotros conocemos, es decir que Jesús fue crucificado?
Eón:
Correcto.
Interlocutor: ¿Pero quién modificó esa historia en la
que Jesús muere en Cachemira como para que Jesús terminara finalmente
crucificado?¿Acaso viajeros del tiempo?
Eón:
Fueron decisiones. Ya señalé que no en todos los casos son los viajeros
del tiempo los que modifican la historia.
Interlocutor: ¿Usted está diciendo que fue una decisión
de Jesús?
Eón: Así
es. Él pensó que podría servir mejor a la humanidad siendo crucificado…
Aquí sí que hay una línea muy delgada entre servicio y sacrificio. Porque
de alguna manera estamos hablando de sacrificio con dolor y no con gozo.
Jesús de alguna manera hubiera querido seguir con sus mensajes, pero
eligió ese golpe de efecto, por llamar de alguna manera a su crucifixión,
para que el Cristianismo fructificara con más fuerza.
Interlocutor: ¿Sin la crucifixión, Jesús hubiera
trascendido igual?
Eón: No,
en absoluto. Hubiera sido una historia como tantas otras. A Jesús se lo
recuerda precisamente por su martirio. Además, el Catolicismo Apostólico
Romano es tan básico que lo que menos le interesa son los mensajes de
Jesús y su amor por la humanidad. Solamente se interesa en sus milagros y
en esa supuesta resurrección.
Interlocutor: Obviamente a la religión le interesa
únicamente lo fenomenológico…
Eón:
Exacto.
Interlocutor: ¿Ese universo alternativo donde Jesús
murió en Cachemira se secó?
Eón: Así
es. Los mundos alternos no persisten. Los que persisten son los universos
paralelos.
Interlocutor: ¿Hay algún otro caso en que la historia
se haya modificado?
Eón: Hay
muchísimos universos alternos que se han secado. En esos universos
alternos el Che Guevara seguía vivo, a Kennedy no lo mataban porque le
había advertido y en su lugar había puesto a un doble, el que es
asesinado, Marilyn Monroe no muere, hay una Tercera Guerra Mundial en
1989…Incluso hay un universo alternativo que se secó donde mi receptáculo
no se encontraba contigo, porque ese día tenía una consulta y no fue a la
reunión que tú habías preparado y después no te ubicó nunca más…
Interlocutor: ¡Qué interesante!
Eón: Y el
Grupo Elron tampoco existió y por lo tanto nunca hubiera salido a la luz
nada, porque tú has sido parte activa de todos los mensajes que Johnakan
ha dado a través de su canalización telepática.
Digamos
como que tú… El decodificador de este receptáculo tiene en estos momentos
dificultades para traducir mi “superconcepto”, por así llamarlo… Es como
que has hecho hincapié en hacer crecer la mediumnidad de mi receptáculo,
lo has incentivado, o tal vez su espíritu de competencia −que es una cosa
buena cuando es sana−, al ver que había otro médium que decía un montón de
groserías, inconscientemente pensó, me refiero al 10 %, “¿y por qué no?”
y se lanzó de lleno…
Es decir
que hubo una serie de factores que incidieron para que mi receptáculo
hiciera de médium, sea el haberse contactado contigo, sea que luego el 90
% vio que su 10 % estaba preparado y entonces le dictó los Aforismos, que
los hizo en una semana y ya superan los trescientos… Todas estas cosas
contribuyeron a que luego comenzara el camino de la mediumnidad con los
mensajes.
Interlocutor: Esto quedó totalmente aclarado… Voy a
aprovechar los minutos de sesión que quedan para hacer otras preguntas…
¿Cuál es la razón de que un viajero del tiempo pueda viajar tanto hacia el
pasado como hacia el futuro? ¿Es acaso porque la Creación es en sí un
presente, independientemente del punto de vista del Absoluto?
Eón: La
Creación es un presente solamente para mí…
Interlocutor:
¿Entonces el viajero del tiempo está en ese presente del Absoluto?
Eón: No,
no es así. El tiempo forma parte de las dimensiones. Cuando nosotros
hablamos de que las dimensiones son físicas, no hablamos de las
dimensiones de los Comics, que muchos delirantes confunden con los planos
espirituales. Cuando hablamos del tiempo hablamos de una dimensión, y así
como tú puedes recorrer las tres dimensiones espaciales, ¿por qué no vas a
poder recorrer la dimensión espacio-temporal?
Interlocutor: Voy entendiendo…
Eón: El
tiempo es una dimensión más y las dimensiones pueden ser recorridas.
Dimensión implica tamaño, dimensión implica longitud. El tiempo no deja de
ser una longitud y puede ser recorrida perfectamente, dependiendo, claro
está, de encontrar las coordenadas adecuadas.
Interlocutor: El punto está aclarado… Ahora bien, el
viajero del tiempo viaja al pasado para reparar los sucesos que se han
alterado. Ya sabemos que no es necesario reparar nada en el plano físico,
pero los viajeros del tiempo creen que sí… ¿Y para qué viajan hacia el
futuro?
Eón: Por
curiosidad.
Interlocutor: ¿Curiosidad? ¿Nada más que curiosidad?
Eón: Así
es, simplemente por curiosidad, por ejemplo para conocer los adelantos,
porque en el futuro no van a reparar nada porque todavía no sucedió… Me
refiero que no sucedió para el viajero del tiempo.
Interlocutor: ¿Y ese viajero del tiempo, en ese tiempo
futuro, podría intervenir para modificar algo?
Eón: En
ese futuro no, pero sí podría modificar el presente para que el futuro
cambie.
Interlocutor: No entiendo…
Eón: Si
de repente en ese futuro hay una noticia impresionante, por ejemplo que ha
sido derrotada tal enfermedad o que tal país se apoderó del mundo…
Hablemos de cuarenta años más… De repente en Medio Oriente encuentran la
fórmula para derrotar a Occidente. Entonces, ese viajero del presente
viaja al 2043 y cuando vuelve le dice al presidente norteamericano que en
el 2028 han descubierto una fórmula para producir, a través de la
destilación del petróleo con determinado producto, un arma tan letal como
para diezmar a un país entero. Y trae esa información del 2043, respecto
del descubrimiento del 2028, al 2003 y esto llega al presidente
norteamericano. Si Estados Unidos tomara recaudos, directamente hace una
invasión a ese país de Medio Oriente, lo destruye por completo, no
importándole el concepto que tengan de él después, y la historia cambia.
O
directamente le pide a ese viajero del tiempo que vuelva al futuro, al
2043, para traer la fórmula de cómo destilar ese petróleo para producir un
arma letal y la produce en el 2004 ó en el 2005.
Es decir
que yendo al futuro se puede cambiar la historia del presente y por lo
tanto también de ese futuro.
Interlocutor: ¿Estos ejemplos son hipótesis muy
teóricas que en la práctica no ocurren o están ocurriendo en algunos
planetas?
Eón: No
son hipótesis teóricas solamente, pues hechos similares están ocurriendo
en algunos mundos.
Interlocutor: ¿Hay algún planeta avanzado donde todos
los habitantes llevan un aparatito “translator”, con el cual quien lo
desee puede viajar al pasado o al futuro? Lo pregunto porque, por ejemplo,
aquí nosotros tenemos un aparatito celular portátil con el cual nos
podemos comunicarnos telefónicamente sin necesidad de ir a nuestros
hogares o a una cabina especial.
Eón: Sí,
eso sucede en algunos mundos, pero no todos poseen ese aparato, de la
misma forma que no todo el mundo posee esos teléfonos portátiles, ya que
hay gente de escasos recursos económicos que ni siquiera sabe lo que es.
Interlocutor: Me refería a que si de alguna forma es un
aparatito que está a disposición de todos los que puedan acceder a él.
¿Sucede algo así en algún planeta con el “Translator”?
Eón: Sí,
así es. Y el que está en condiciones puede acceder a él con toda facilidad
y viajar por el tiempo.
Interlocutor: ¿Y
esos viajeros no producen algún caos alterando los hechos sucedidos?
Eón: Hay
reglas que tienen que ser respetadas.
Interlocutor: ¿Y cómo hacen para que esas reglas se
respeten?
Eón:
Existen lo que ustedes llamarían “policías del tiempo” que vigilan para
que esas reglas no sean violadas.
Interlocutor: Era casi obvio suponer algo así… ¿Vienen
naves espaciales del futuro? Me refiero a los llamados Ovnis.
Eón: Sí,
por supuesto.
Interlocutor: ¿Estamos hablando de que vienen Ovnis del
futuro con turistas o solamente con tripulantes?
Eón: Con
turistas… ¿Por qué no iba a haber algo así?
Interlocutor: ¿Tanto hacia el pasado como hacia el
futuro?
Eón: Así
es.
Interlocutor: Confieso que estoy completamente
asombrado…
Eón:
Incluso podrías viajar con una filmadora hasta el Jurásico y filmar a los
dinosaurios en vivo.
Interlocutor: Realmente nunca pensé que algo así podría
ser posible… Aunque pienso que sería más interesante ir hacia el futuro…
En definitiva, ¿en algunos planetas hacen viajes turísticos hacia el
pasado o hacia el futuro como nosotros podemos hacer turismo a las
Cataratas del Iguazú?
Eón: Así
es, pero ten en cuenta que estos adelantos tecnológicos no significan
necesariamente que también estén avanzados espiritualmente.
Interlocutor:
Eso lo doy por descontado.
Eón: Es
como aquellos millonarios que están en su yate sin hacer nada, disfrutando
del sol y sin ayudar a nadie.
Interlocutor: ¿Tengo diez minutos más de sesión?
Eón: Mi
receptáculo está muy agotado porque la mía es demasiada energía para su
decodificador.
Interlocutor: Quiero preguntar algo sobre mi
encarnación como Nerón… Existió un universo alternativo donde Nerón no
incendió Roma, ni asesinó a su madre ni tampoco a Popea?
Eón: Así
es.
Interlocutor: ¿Cómo percibe usted, como Absoluto, para
quien todo es un presente, a todos los Horacio Velmont de todos los
instantes de este Big Bang? Me refiero a si los percibe en forma
individual según cada instante o en una totalidad.
Eón: Los
percibo de las dos maneras, en forma individual y como un continuum. Es
algo similar a esos espejos de los parques de diversiones donde la imagen
de la persona se ve reflejada repetidamente.
Interlocutor: Ya se habló de que existen 22 universos
paralelos como un factor de equilibrio de la Creación. ¿Es también un
factor de equilibrio el que tenga que haber en cada uno de los 22
universos paralelos la misma cantidad de elohim, de Energías Divinas, de
ángeles, de espíritus, de elementales, etc.?
Eón: Así
es. De la misma forma que por la gravedad los planetas son casi esféricos.
Interlocutor: En una sesión yo le pregunté si Kronbus
me había visitado como una curiosidad de su parte y la respuesta fue que
sí, aunque no se dio a conocer. Pero la pregunta que me hago es cómo supo
Kronbus encarnado, no teniendo memoria reencarnativa, quién era su
encarnación anterior.
Eón: La
respuesta es muy fácil. Se comunicó telepáticamente con su Yo Superior, ya
que su comunicación con su 90 % es fluida, y éste se lo dijo.
Interlocutor: El punto está aclarado. En realidad pensé
que había algo más complicado de por medio, quizás algún tipo de
tecnología… ¿El Absoluto se ocupa de cosas menores, por así decirlo? Hoy,
por ejemplo, iba a suspender la sesión porque llovía torrencialmente, pero
de pronto el tiempo mejoró y hasta salió el sol… ¿Fue simple casualidad?
Eón: No,
no fue casualidad. Fue programado por mí porque era sumamente importante
que este mensaje lo tuvieran hoy mismo, especialmente en lo que respecta a
los distintos tipos de espíritus conceptuales, superiores o inferiores.
Utilizo las palabras superiores o inferiores solamente en cuanto a
comprensión, es decir, sin ninguna connotación valorativa.
Interlocutor: Está claro… Le comento que el viernes me
sucedió algo bastante extraño. Trataba de remontarle un barrilete a mi
nieto y no había forma de hacerlo porque el viento hacía como remolinos.
Entonces le pedí al Absoluto que me mandara un viento propicio para
remontarlo, sintiéndome bastante… ¿cómo diría? entre tonto y avergonzando,
pero el asunto es que empezó a soplar un viento hermoso y hasta pude
utilizar todo el piolín que tenía enrollado, más de doscientos metros,
obviamente ante la alegría de mi nieto. Naturalmente que me quedó la
espina de saber si fue casualidad o estuvo presente la mano de Eón…
Eón: Son
pequeñas intervenciones que hago cuando no violo ningún libre albedrío o
no afecto ningún karma o ningún servicio…
Interlocutor: ¿Fue usted, entonces?
Eón: Así
es. Con las condiciones restrictivas mencionadas tanto puedo intervenir
para levantar un viento que haga volar un barrilete como para ocuparme de
un mundo completo donde haya un sismo. Si no pudiera hacerlo implicaría
que estoy limitado y yo no tengo límites.
Interlocutor: ¿Se puede decir, entonces, que hay más
intervenciones del Absoluto que las que uno podría imaginar?
Eón:
Correcto. Pero nunca podría con mi intervención ir en contra del albedrío
por mí creado… Haz una pregunta más, porque el decodificador de mi
receptáculo está muy cargado…
Interlocutor: Haría dos… La primera es cómo se
definiría a sí mismo el Absoluto, más allá de la conocida como “principio
y fin de todas las cosas”. Y la segunda es si es posible pasar de un
universo paralelo a otro y eso se ha logrado en otros planetas. Y por
supuesto qué sucedería si yo paso a un universo paralelo… ¿por ejemplo
puedo encontrarme conmigo mismo?
Eón:
Respondo esta última pregunta primero. Sí, es posible pasar de un universo
paralelo a otro y en otros mundos ya se ha hecho. Si tú pasas a un
universo paralelo te podrías encontrar con una persona de tu mismo ADN…
Interlocutor: ¿Pero no podría haber algún problema en
ese encuentro?
Eón: No,
no habría ningún problema. No es como sucede en las películas de ficción
de clase B donde el encuentro consigo mismo produce una especie de
explosión temporal.
Interlocutor: ¿Si en un universo paralelo mi espíritu
“doble”, para llamarlo de alguna manera, encarnó como mujer incluso podría
formar pareja?
Eón: Por
supuesto. Nada lo impide.
Interlocutor: ¿En algún planeta se ha dado una
situación así?
Eón: No,
no se ha dado.
Interlocutor: ¿Pero se han encontrado por lo menos?
Eón: Sí,
se han encontrado pero no lo han sabido. A veces no es igual el ADN y no
siempre son gemelos.
Interlocutor: Entiendo… ¿La forma de pasar a los
universos es con máquinas o simplemente caminando y pasando por los nadis
o aberturas dimensionales?
Eón: De
las dos maneras.
Interlocutor: ¿Y en cuanto a su autodefinición?
Eón: La
dijo Johnakan al comienzo de El Cielo responde I, un espíritu al que
respeto tanto, pero tanto, y que está más elevado que sus propios Maestros
por su creación, obviamente sin desmerecer a nadie: “Al principio era la
Nada y el Todo”.
Interlocutor: ¿Ésta es, entonces, la mejor definición
del Absoluto?
Eón: Así
es. Estúdiala y comprenderás... Les doy un abrazo enorme…
Interlocutor: Gracias y “hasta pronto”… Vuelvo a
bromear…