web
analytics
Estadísticas
 
 
 

Neale Donald Walsch

Conversaciones con Dios 3

Capitulo XI 

 

¿Podrías decirme algunas cosas sobre el alma, por favor?

 Seguro. Trataré de explicar dentro de un rango de comprensión limitado. No permitas frustrarte, si algunas cosas no “tienen sentido” para ti. Trata de recordar que estás pasando esta información a través de un filtro único, un filtro que fue diseñado por ti para protegerte de recordar demasiado.

 Recuérdame de nuevo por que hice eso.

El juego terminaría, si recordaras todo. Viniste aquí por un motivo particular y tu Propósito Divino se frustraría, si comprendieras como se reunió todo. Algunas cosas siempre serán un misterio en este nivel de consciencia y es correcto que así sea.

No trates de solucionar todos los misterios. No al mismo tiempo, de cualquier manera. Da una oportunidad al universo y se desplegará a su debido tiempo.

Disfruta la experiencia de llegar a ser.

 Darme prisa lentamente.

Exactamente.

     

 Mi padre solía decir eso.

 Tu padre fue un hombre sabio y maravilloso.

 No muchas personas lo describirían de esa manera.

No lo conocieron muchas personas.

Mi madre lo conoció.

Sí, lo conoció.

Y lo amó.

Sí, lo amó.

Y lo perdonó

Sí, lo perdonó.

Por todo su comportamiento que causó daño.

Sí, ella comprendió, amó, perdonó y en esto fue y es un modelo maravilloso, una maestra bendita.

Sí. Ahora... ¿me hablarás sobre el alma?

Lo haré. ¿Qué deseas saber?

Empecemos con la primera pregunta obvia: ya conozco la respuesta, pero nos da un punto para empezar. ¿Existe el alma humana?

Sí. Es el tercer aspecto de tu ser. Tú eres un ser de tres partes, formado por cuerpo, mente y espíritu.

Sé dónde está mi cuerpo, puedo ver eso. Creo que sé dónde está mi mente, se encuentra en la parte de mi cuerpo llamada cabeza. Sin embargo, no estoy seguro de tener idea de dónde...

Espera un minuto. Espera. Estás equivocado en algo. Tu mente no está en tu cabeza.

¿No está allí?

No. Tu cerebro está en tu cráneo, más no tu mente.

¿Dónde está entonces?

En cada célula de tu cuerpo.

Vaya...

Lo que llamas la mente es en realidad una energía. Es... pensamiento. El pensamiento es una energía, no un objeto.

Tu cerebro es un objeto. Es un mecanismo físico y bioquímico, el más grande y sofisticado, pero no el único mecanismo en el cuerpo humano, con el que el cuerpo transmite o convierte la energía, que es tu pensamiento, en impulsos físicos. Tu cerebro es un transformador, al igual que todo tu cuerpo. Tienes transformadores pequeños en cada célula. Los bioquímicos han señalado que las células individuales (las células de la sangre, por ejemplo) parecen tener su propia inteligencia. En realidad, la tienen.

Eso no es cierto sólo en relación con las células, sino con partes más grandes del cuerpo. Todos los hombres del planeta saben sobre una parte específica del cuerpo que a menudo parece tener una mente propia...

Sí y todas las mujeres saben lo absurdos que son los hombres cuando ésa es la parte del cuerpo que permiten que influya en sus elecciones y decisiones.

Innegable.

¿Quieres saber cómo detener el circo?

¿Por supuesto!

Esto es a lo que me referí anteriormente cuando hablé sobre elevar la energía de la vida para incluir los siete centros chakra.

Cuando tus elecciones y tus decisiones provienen de un lugar más grande que el local limitado que describiste, es imposible que las mujeres te controlen y tú nunca intentarás controlarlas.

El único motivo por el que las mujeres recurren a esos medios de manipulación y control es que no parece haber otro medio de control, al menos, ninguno tan efectivo, y sin algunos medios de control, los hombres frecuentemente se vuelven... incontrolables.

Sin embargo, si los hombres demostraran un poco más su naturaleza superior y si las mujeres recurrieran más a esa parte de los hombres, la llamada “batalla de los sexos” terminaría. Al igual que casi todas las otras batallas de cualquier clase en su planeta.

Como dije antes, esto no significa que los hombres y las mujeres deben renunciar al sexo o que el sexo sea parte de una naturaleza inferior de los seres humanos. Significa que la energía sexual sola, cuando no se eleva a los chakras superiores y se combina con las otras energías que hacen completa a una persona, produce elecciones y resultados que no reflejan a toda la persona. Éstos son a menudo algo menos que magnificencia.

Todo Tú eres magnificencia; no obstante, cualquier cosa que no sea Todo Tú es menos que magnificencia. Si deseas garantizar que producirás una elección o resultado menos que magnífico, toma una decisión sólo desde tu chakra raíz. Luego observa los resultados.

Son tan predecibles como pueden ser 

Hmmm. Creo que sabía eso.

Por supuesto, lo sabías. La pregunta más grande que enfrenta la raza humana no es cuando aprenderán, sino cuando actuarán respecto a lo que ya aprendieron.

Entonces, la mente está en cada célula...

Sí y hay más células en tu cerebro que en cualquier otra parte de tu cuerpo, por lo que parece que tu mente está allí. Sin embargo, ése es sólo el centro de procesamiento principal, no el único 

Bien, lo entiendo con claridad. Entonces, ¿dónde está el alma?

¿Dónde crees que está?

¿Detrás del Tercer Ojo?

No.

¿En medio de mi pecho, a la derecha de mi corazón, debajo del esternón?

No

De acuerdo, me rindo.

Está en todas partes.

¿En todas partes?

En todas partes.

Como la mente.

Espera un momento. La mente no está en todas partes.

¿No lo está? Pensé que habías dicho que estaba en cada célula del cuerpo.

Eso no es “en todas partes”. Hay espacios entre las células. En realidad, tu cuerpo es 99 por ciento espacio.

¿Es allí dónde se encuentra el alma?

El alma está en todas partes en ti, , a través de ti y a tu alrededor. Es eso que te contiene.

¡Espera un minuto! ¡Ahora, Tú espera un minuto! Siempre me enseñaron que el cuerpo es el recipiente de mi alma. ¿Qué sucedió con eso que dice “Tu cuerpo es el templo de tu ser”?

Es una forma de hablar.

Es útil para ayudar a las personas a comprender que son más que sus cuerpos, que hay algo más grande que ellas son. Literalmente, esto quiere decir que el alma es más grande que el cuerpo. No se lleva dentro del cuerpo, sino que lleva el cuerpo en su interior.

Te escucho, pero aún se me dificulta imaginar esto.

¿Alguna vez has oído hablar del “aura”?

Sí. Sí. ¿Esto es el alma?

Es lo más cerca que podemos llegar en tu lenguaje, en tu comprensión, para darte una imagen de una realidad enorme y compleja. El alma es lo que te mantiene junto, así como el Alma de Dios es lo que contiene el universo y lo mantiene unido.

¡Vaya! Esto es totalmente lo contrario de todo lo que había pensado.

Espera, hijo Mío. Las inversiones acaban de empezar.

Si en un sentido, el alma es él “aire dentro y alrededor de nosotros” y si el alma de todos los demás es la misma, ¿dónde termina un alma y empieza la otra?

No me lo digas, no me lo digas...

¿Comprendes? ¡Ya conoces la respuesta!

¡No hay un lugar donde otra alma “termine” y la nuestra “empiece”! Así como no hay lugar donde el aire en la sala se “detenga” y el aire en el comedor “empiece”. Todo es el mismo aire. ¡Todo es la misma alma!

Acabas de descubrir el secreto del universo.

Si Tú eres quién contiene el universo, así como nosotros somos los que contenemos nuestros cuerpos, entonces, ¡no hay lugar donde “termines” y nosotros “empecemos”!

(¡Ejem!)

Puedes aclarar tu garganta todo lo que desees. ¡Para mí, esta es una revelación milagrosa! Quiero decir que sabía que siempre entendía esto, ¡pero ahora lo comprendo!

Eso es maravilloso, ¿Acaso no es maravilloso?

Mi problema respecto a entender en el pasado tenía que ver con el hecho de que el cuerpo es un recipiente discreto, que hace posible diferenciar entre “este” cuerpo y “ese” cuerpo y como siempre pensé que el alma habitaba en el cuerpo, por lo tanto notaba la diferencia entre “esta” alma y “esa” alma.

Sí, naturalmente.

Si el alma está en todas partes adentro y afuera del cuerpo, en su “aura”, como Tú lo expresaste, entonces, ¿dónde “termina” un aura y “empieza” otra? ¡Ahora puedo ver, por primera vez en realidad, en términos físicos, como es posible que un alma no “termine” y otra “empiece” y que es verdad físicamente que Todos Somos Uno!

¡Hurra! Eso es todo lo que puedo decir. ¡Hurra!

Siempre pensé que ésta era una verdad metafísica. ¡Ahora comprendo que es una verdad física! ¡La religión se ha convertido en ciencia!

No me digas que no te lo dije.

Espera un momento. Si no hay lugar dónde un alma termine y la otra empiece, ¿eso significa que no existe el alma individual?

Bueno, sí y no.

Una respuesta en verdad propia de Dios.

Gracias.

Con franqueza, esperaba más claridad.

Espera un poco. Nos movemos con demasiada rapidez, te duele la mano por escribir tanto.

Quieres decir por garabatear furiosamente.

Sí. Recuperemos el aliento. Nos relajaremos. Voy a explicártelo todo.

De acuerdo. Adelante. Estoy listo.

¿Recuerdas que en muchas ocasiones te hablé acerca de lo que Yo he llamado Dicotomía Divina?

Sí.

Bueno, esto es una de ellas. En realidad, es la más grande.

Comprendo.

Es importante aprender sobre la Dicotomía Divina y comprenderla plenamente, si quieres vivir en nuestro universo con gracia.

La Dicotomía Divina sostiene que es posible que dos verdades aparentemente contradictorias existan en forma simultánea, en el mismo espacio.

Ahora, en tu planeta, a la gente se le dificulta aceptar esto. Les gusta tener orden y cualquier cosa que no encaje en su imagen la rechazan automáticamente. Por este motivo, cuando dos realidades empiezan a afirmarse y parecen contradecirse mutuamente, se asume de inmediato que una de ellas debe ser errónea, falsa, no verdadera. Se necesita mucha madurez para comprender y aceptar que, en realidad, ambas pueden ser verdaderas.

Sin embargo, en el reino de lo absoluto (lo opuesto al reino de lo relativo, en el que viven ustedes) es muy claro que la verdad que es Todo Lo Que Hay en ocasiones produce un efecto que, visto en términos relativos, parece una contradicción.

A esto se le llama Dicotomía Divina y es una parte muy real de la experiencia humana. Como dije, es virtualmente imposible vivir con gracia sin aceptar esto. Uno siempre refunfuña, se enfada, discute, busca en vano “justicia” o trata seriamente de reconciliar fuerzas opuestas que nunca se tuvo la intención de que se reconciliaran, pero que, debido a la naturaleza de la tensión entre ellas, producen exactamente el efecto deseado.

El reino de lo relativo se mantiene en realidad unido por esas tensiones. Como ejemplo, la tensión entre el bien y el mal. En la realidad final no existe el bien y el mal. En el reino de lo absoluto, sólo hay amor. No obstante, en el reino de lo relativo ustedes crearon la experiencia de lo que “llaman” mal y lo hicieron por un motivo muy claro. Deseaban experimentar amor; no sólo “saber” que el amor es Todo Lo Que Hay y no pueden experimentar algo, cuando no hay nada más aparte de eso. Por eso, crearon en su realidad (y continúan haciéndolo cada día) una polaridad del bien y el mal, utilizando así una, para poder experimentar la otra.

Aquí tenemos una Dicotomía Divina, dos verdades aparentemente contradictorias que existen en forma simultánea, en el mismo lugar. Específicamente:

Existe el bien y el mal.

Todo lo que hay es amor.

Gracias por explicarme esto. Ya hablaste sobre este tema antes, pero gracias por ayudarme a comprender aún mejor la Dicotomía Divina.

Estás servido.

Ahora, como dije, la mayor Dicotomía Divina es la que miramos ahora.

Sólo hay Un Ser y, por lo tanto, sólo Un Alma. Hay muchas almas en Un Ser.

Así es como funciona la dicotomía: te acabo de explicar que no existe separación entre las almas. El alma es la energía de la vida que existe dentro y alrededor (como el aura) de todos los objetos físicos. En un sentido, es eso que “mantiene” a todos los objetos físicos en su lugar. El “Alma de Dios” se encuentra en el universo, el “alma del hombre” se encuentra en cada cuerpo humano individual.

El cuerpo no es un recipiente, una “casa” para el alma; el alma es un recipiente para el cuerpo.

Eso es correcto.

No obstante, no hay “línea divisoria” entre las almas; no hay un lugar donde “un alma” termine y la “otra” empiece. Por lo tanto, en realidad es un alma que está en todos los cuerpos.

Correcto.

Sin embargo, un alma “siente como” un puñado de almas individuales.

Así lo hace en verdad, así lo hago Yo, por planeación.

¿Puedes explicarme como funciona?

Sí.

Aunque no hay una separación real entre las almas, es verdad que el material con el que está hecha Un Alma se manifiesta en la realidad física con velocidades diferentes, produciendo distintos grados de densidad.

¿Diferentes velocidades? ¿Cuándo entró en juego la velocidad?

Toda la vida es una vibración. Lo que ustedes llaman vida (podrían fácilmente llamarla Dios) es energía pura. Esa energía vibra constantemente, siempre. Se mueve en ondas. Las ondas vibran a diferentes velocidades, produciendo distintos grados de densidad o de luz. Esto, a su vez, produce lo que ustedes llamarían “efectos” diferentes en el mundo físico; en realidad, objetos físicos diferentes. Aunque los objetos son diferentes y moderados, la energía que los produce es exactamente la misma.

Permite que mencione de nuevo el ejemplo que utilizaste, del aire entre tu sala y el comedor. Fue un buen uso de la imaginación que brotó de ti. Una inspiración.

Adivina de dónde.

Sí, yo te la di. Dijiste que no había un lugar específico entre esos dos sitios físicos donde el “aire de la sala” se detuviera y el “aire del comedor” empezara. Eso es verdad. Sin embargo, hay un lugar donde el “aire de la sala” es menos denso. Esto es, que se disipa, que se vuelve más “delgado”. Lo mismo sucede con el “aire del comedor”. ¡Mientras más te alejes del comedor, menos olerá la cena!

El aire de la casa es el mismo aire. No hay “aire separado” en el comedor. Aún así, el aire en el comedor con seguridad parece ser “otro aire”, ¡porque huele diferente!

Debido a que el aire tomó características diferentes, parece que es aire diferente, pero no lo es. Es el mismo aire. Sólo hay un aire, que se mueve hacia adentro, alrededor y a través de todo.

Esto es claro. Lo “capto” totalmente. Me gusta la forma como me explicaste el universo, de una manera que “capto” totalmente 

Gracias. Lo estoy intentando. Permíteme continuar.

Por favor.

Como el aire en tu casa, la energía de la vida, lo que llamamos el “Alma de Dios”, toma características diferentes al rodear distintos objetos físicos. En realidad, esa energía se une de una manera particular para formar esos objetos.

Cuando las partículas de energía se juntan para formar la materia física, se concentran mucho. Se mezclan, se mueven juntas. Empiezan a “parecer semejantes”, incluso a “sentirse como” unidades distintas. Esto es, empiezan a parecer “separadas”, “diferentes” de toda la demás energía. No obstante toda es la misma energía, comportándose en forma diferente.

Es ese acto de comportarse de diferente manera el que hace posible que Eso que Es Todo se manifieste como “Eso Que Son Muchos”.

Como lo expliqué en el Libro 1, Eso Que Es no puede experimentarse a sí mismo como Lo Que Es, hasta desarrollar esta habilidad de diferenciar. Por lo tanto, Eso Que Es Todo se separó en Eso Que Es Esto y Eso Que Es Eso. (Trato de simplificarlo ahora.)

Él “conjunto de energía” que se unió en unidades discretas, que dan cabida a seres físicos, es lo que ustedes decidieron llamar “almas”. Las partes de Mí que se han convertido en todos Ustedes son eso sobre lo que hablamos aquí. La Dicotomía Divina es:

Sólo hay uno de Nosotros.

Hay muchos de Nosotros.

¡Vaya esto es maravilloso!

Tú Me lo dices.

¿Continúo?

No, detente aquí. Estoy aburrido.

¡Sí, continúa!

De acuerdo.

Cuando la energía se une, se vuelve como dije, muy concentrada. Mientras más se aleje uno del punto de esta concentración, más se disipa la energía. El “aire se vuelve más delgado”. El aura se desvanece. La energía nunca desaparece por completo, porque no puede desaparecer. Es el material con el que todo está hecho. Es Todo Lo que Hay. Sin embargo, puede volverse muy delgada, muy sutil, casi “no estar allí”.

Entonces, en otro lugar (en otra parte de Sí Mismo) puede unirse de nuevo, una vez más “juntarse” para formar lo que ustedes llaman materia y lo que “parece” una unidad moderada. Ahora, las dos unidades aparecen separadas entre sí y en realidad no hay ninguna separación.

Esto es en cada término muy simple y elemental, la explicación detrás de todo el universo físico.

¿Puede ser verdad? ¿Cómo sé que no acabo de inventar todo esto

Sus científicos ya están descubriendo que los bloques de construcción de toda la vida son los mismos.

Trajeron rocas de la luna y encontraron el mismo material que encontraron en los árboles. Separan un árbol y encuentran el mismo material que encuentran en ti.

Te digo esto: todos somos el mismo material.

Todos somos la misma energía, unida, comprimida en diferentes formas para crear formas distintas y materia diferente.

Nada “importa” en sí mismo o de sí mismo. Esto es, nada puede convertirse en materia por sí mismo. Jesús dijo: “Sin el Padre, Yo no soy nada”. El padre de todo es el pensamiento puro. Ésta es la energía de la vida. Esto es lo que han elegido llamar Amor Absoluto. Éste es el Dios y la Diosa, la Alfa y la Omega, el Principio y el Fin. Es el Todo en Todo, el Movedor Inmovible, la Fuente Principal. Es eso que han tratado de comprender desde el inicio del tiempo. El Gran Misterio, el Enigma Eterno, la verdad eterna.

Sólo hay Uno de Nosotros y, por lo tanto, esto es ESO QUE TÚ ERES.

 

 
 

 
 

 
         
         
       
       
       
Conferencias Místicas